Tokata | Boletín de difusión, debate y lucha social Entradas

Presxs en lucha

En la cárcel de Estremera (Madrid VII), los carceleros del módulo 3 (que sepamos) han decidido porque sí, ya como dinámica, abrir las celdas un cuarto de hora, veinte minutos y hasta media hora después de las 8:30, la hora «oficial» que ellos ordenan y estipulan en su reglamento, el que toda la gente presa tiene obligación de cumplir. Esto supone robar horas de patio y actividad, otro suplemento de condena que la institución impone, como jueces supremos, ilegalmente, con nocturnidad y alevosía, palabras que gustan de utilizar en su jerga jurídico-criminal.

Cómo nadie en este módulo se ha quejado jamás de esta clara vulneración de derechos, el día 23 de octubre ocurrieron los hechos que queremos denunciar y que están perjudicando gravemente a nuestro amigo y compañero Toni Chavero, preso actualmente en dicho módulo. Aquella mañana del pasado 23 de octubre, harto de esperar como todas las mañanas, Toni cogió el interfono para preguntar por qué siempre les abren tarde, cada día. Al otro lado, una funcionaria le contestó con las siguientes palabras:

¿Para qué cojones llama usted? ¡Deje ya de molestar!

Poco rato después se presenta en la celda de Toni un jefe de servicios (cuyo nombre irá incluido en la denuncia) acompañado de su «séquito» y le espeta:

¡Me está usted levantando el módulo! ¡Aquí el único que da voces soy yo! ¡Usted no sabe quién soy yo!

Toni, que no había dado voces, sólo preguntado, le contestó que sabía de sobra quién era, que le conocía perfectamente y no sólo de esa cárcel y que lo que tenían que hacer era abrir a las 8:30, no quitarles cada día, minuto a minuto, esas preciadas horas allá dentro, y que esa imposición era ilegal. Afortunadamente, Toni no fue represaliado en ese momento, ni llevado a aislamiento, pero ha sido castigado con dos partes muy graves ¡por hacer una pregunta más que oportuna a una funcionaría de prisiones! Dichos partes conllevan que Toni no pueda acceder a los permisos que le habían denegado y que podía disfrutar ahora, a principios de Noviembre. Es una clara venganza que no tiene ningún sostén legal, cómo las otras mil y una ilegalidades que cometen los carceleros y que pasan desapercibidas, porque los jueces de vigilancia corroboran sistemáticamente las versiones de los funcionarios. Y porque apenas casi nadie allí dentro denuncia lo que pasa dentro de los muros, por miedo, por ignorancia o por simple comodidad. Por lo que sea.

Por ello, algunxs amigxs y compañerxs de Toni y él mismo, queremos que se sepa la situación en la que se encuentra y animamos a que otros grupos e individualidades sensibles contra estas arbitrariedades carceleras se unan apoyando a Toni con el envío de llamadas y faxes a los siguientes números de Estremera. Importante al llamar, cuando os pregunte la máquina, marcar la extensión que indicamos:

Prisión de Estremera (Centralita): 91 8750000 (marcar extensión número 9 – SEGURIDAD)

FAX – 91 8750031

A continuación, dejamos modelo para enviar como fax y también puede servir como guión para la llamada telefónica.

MODELO

 Estamos al corriente de la situación que se vive en el módulo tres, donde ustedes abren las celdas tarde todos los días, arbitrariamente y por dinámica. El 23 de octubre pasado, sancionaron a nuestro compañero José Antonio Chavero con dos partes muy graves, sólo por preguntarles el porqué de ese retraso, no recibiendo de ustedes aclaración alguna. Esos partes cierran la posibilidad a nuestro compañero de poder disfrutar de varios permisos y ustedes lo saben de sobra. No tienen en cuenta sus horarios y encima castigan a quien pregunta.

Exigimos que anulen esas injustas y arbitrarias sanciones. Nuestros abogados y abogadas corroborarán que se esto cumpla o tomaremos medidas legales y haremos una amplia difusión en diversos medios y en las puertas de las cárceles de lo que ocurre con nuestro compañero.

Presxs en lucha

Presxs en lucha

Hoy, 16 de octubre de 2023, en la cárcel de Estremera (Madrid VII), el compañero Toni Chavero comienza una serie de ayunos (los días 16, 18, 20, 22 y 24 de octubre) en solidaridad con el compañero prisionero del estado chileno, Marcelo Villarroel Sepúlveda, quien, después de 16 años seguidos de cárcel y habiendo pagado hasta 29 años a lo largo de toda una vida de lucha, se encuentra sufriendo una cadena perpetua encubierta. Marcelo podria haber optado a la libertad condicional a partir de diciembre del 2019, pero con la modificación del Decreto Ley 321 de la ley 21.124 en enero de 2019, se le han aplicado retroactivamente condenas de la justicia militar instaurada por la dictadura cívico-militar tras el golpe de Estado encabezado por el general Pinochet del 11 de septiembre de 1973 (hace más de 50 años). El actual gobierno «de izquierdas» no le permite optar a la libertad condicional hasta 2036 y el cumplimiento definitivo lo tendría fijado en 2056. Ponemos arriba un vídeo elaborado para una semana de solidaridad con el compañero convocada en septiembre pasado, donde se informa sucintamente sobre su historia y su situación actual. Y aquí debajo el comunicado de Toni anunciando su acción solidaria. En los enlaces del final del todo, más información sobre Marcelo y Toni.

Estremera, 2 de Octubre de 2023

Salud, compañeros:

Soy Toni Chavero. Os escribo desde este pozo infecto donde ya sabéis que los hierofantes de la sagrada orden del cepo campan a sus anchas, con sus desmanes, amparados por la inacción de los siervos con los que me toca convivir forzadamente en esta puta mierda de módulo. Salvo dos honrosas excepciones, dos buenos compañeros, aquí ni dios abre la boca ante las pasadas que se dan los carceleros.

He podido saber por mis hermanxs de fuera de la situación del compañero Marcelo Villarroel, preso en el centro de exterminio de Rancagua (Chile). Preso, a pesar de que desde el 2019 podía haber postulado a algún tipo de lo que los hierofantes denominan «beneficios» penitenciarios (permisos, etc.). Muy lejos de ello, y basándose en las «indicaciones» de Gendarmería (los carceleros de $hile), le aplican otra pila de años durante el gobierno de Piñera. Y luego llegaron los «progresistas», continuando la «labor» de sus socios del lado derecho, porque el complejo industrial penitenciario se gestiona igual desde los dos lados. Al señor Boric, el «Coleta» de Chile, el libertador, una ley militar emanada de Pinochet le ha venido al pelo (igualito que al Piñera) para aplicársela a nuestro hermano Marcelo, la dominación justifica siempre al fascismo, de izquierdas y de derechas, cuando se trata de mantener enjaulado a cualquier refractarix, a cualquier hereje. No hay ninguna diferencia. Ya sabemos lo que significa el poder y la partitocracia: partidos obreros que equivalen a obreros partidos, cosificados, atomizados alrededor de su amado líder.

No conozco personalmente a Marcelo, tampoco conozco a Alfredo, el compañero italiano al que van a revisar en breve su permanencia en el 41 Bis y por el que , junto al compañero Peque, estuvimos ayunando este pasado invierno. Lxs anarquistas no necesitamos conocernos personalmente para mostrarnos cariño, respeto y solidaridad. Es por ello que decido, de forma individual, ayunar los próximos días 16, 18, 20, 22 y 24 de octubre , en solidaridad con mi hermano Marcelo, por su inmediata liberación y por la anulación de las condenas de fiscalía militar. Que Marcelo sea el único civil condenado por una ley militar extinguida no tiene otra lectura: El lado izquierdo y el derecho se complementan perfectamente. Acá ya hemos comprobado el «interés» que se han tomado los «progresistas» por las muertes, las torturas y el abandono sanitario al que se viene sometiendo a la gente presa en los centros de exterminio dispersados por el estado ex-pañol y nazi-anal, durante los más de cuatro años que llevan gobernando.

Mando un fuerte abrazo a mi gente de dentro y de fuera, a lxs que seguís levantando la cabeza y lleváis la dignidad puesta desde que os levantáis por las mañanas a encarar el día. Mi recuerdo no se pierde para mandar también mi cariño y complicidad a Mónica y Francisco. Estamos también con ustedes, por lo menos, algunxs quedamos todavía por estos lares.

Hagamos algo para ejercer la máxima presión. Voy a enviar escritos a la embajada de Chile en Madrid para recordarlos que sus sucias maniobras con Marcelo no pasan desapercibidas aquí, en su zona de confort madrileña, con sus colegas del lado izquierdo, ni en las calles, ni en las cárceles.

Usemos la imaginación, compañerxs, Marcelo tiene que estar en la calle YA MISMO, con su mujer y sus cinco hijxs. Ha cumplido su «deuda» con propina , así es que…

¡MARCELO A LA KALLE AHORA!

¡POR LA ANULACIÓN DE LAS CONDENAS DE FISCALÍA MILITAR PARA NUESTRO COMPAÑERO!

¡Hasta destruir el último bastión de la sociedad carcelaria!

¡Ánimo y Fuerza, Hermanxs y Compañerxs!

Toni

El injusto cumplimiento de condenas de la fiscalía militar en el caso de Marcelo Villarroel

Más información sobre Toni Chavero en Tokata

Presxs "políticxs" Presxs en lucha

La cárcel de Brieva (Ávila), conocida por haber sido el lugar de encierro privilegiado de Ignacio Urdangarín y José Luis Roldán, es una cárcel para mujeres especializada en régimen cerrado, ya que en ella se encuentran una gran parte de las mujeres presas penadas clasificadas en primer grado. También es famosa por la dureza con que se trata a las presas y por el elevado número de supuestos suicidios y muertes en extrañas circunstancias que se han producido en ella.

Hemos tenido noticia de que ayer, 10 de octubre de 1023, murió allí una de las personas reclusas, Sannah Cadiri. Algunas compañeras suyas informaron de que había sido trasladada de módulo, «del azul al amarillo»,  después de algún incidente. En Brieva, los módulos se designan por colores; el azul sería el de vida normal y el amarillo el de aislamiento. Algunas compañeras vieron como los carceleros la llevaban por los pasillos  y como le pegaban. Después, un carcelero les dijo que la habían matado de una paliza y, finalmente, la dirección de la cárcel dijo que había aparecido ahorcada y que ella misma se había autolesionado mientras la llevaban a aislamiento. Las presas del módulo azul hicieron un plante en el patio hasta las once y media de la noche protestando y reclamando ser informadas de lo que había pasado. No ha salido ninguna noticia de nada de ello en ningún medio de comunicación.

A continuación, los números de teléfono o fax y los correos electrónicos de las instituciones a quienes corresponde la denuncia e investigación de los hechos para exigirles que se pongan en marcha e informen de lo sucedido:

Centro penitenciario. Teléfono: 920259023. Correo electrónico: Sgpma.Avila@dgip.mir.es
 
Juzgado de guardia. FAX: 920359005. Correo electrónico: mixto3avila@justicia.es 
 
Fiscalía Provincial de Ávila. FAX: 920359012. Correo electrónico: fiscalia.avila@fiscal.es

La cárcel mata Cárcel=Tortura

Continúa la lucha por que sean aclaradas las causas de la muerte de David Jehová Hiruela Moreno el pasado 14 de julio, cuando se encontraba en una celda de aislamiento de la cárcel de Picassent. El juzgado «competente» ha archivado el caso y parece cerrado el muro de silencio que garantiza la impunidad de los carceleros del Estado español, en cuyas cárceles mueren anualmente alrededor de 200 personas presas, muchas de ellas violentamente y también por supuesto suicidio o sobredosis de drogas. Las autoridades suelen intervenir rutinariamente, más para dar carpetazo a cada caso que para investigar, arrebatando casi siempre a las familias la posibilidad de ejercer a tiempo su derecho a personarse en el procedimiento judicial, Y en las cárceles españolas siguen abundando la tortura y los malos tratos en total impunidad; sigue existiendo un régimen de castigo que es en sí mismo tortura; la catástrofe de la sanidad penitenciaria continúa avanzando sin que se haga nada, a pesar de que es de dominio público el abandono médico-sanitaro creciente que sufren las personas presas; no se excarcela a las personas presas gravemente enfermas hasta que está asegurada su muerte a corto plazo; se suministran fármacos de riesgo sin control médico adecuado; se abandona a los enfermos mentales y se les castiga por el hecho de serlo… Como se relata en el artículo publicado ayer en la web de La Directa cuya traducción al castellano ponemos más abajo, la familia de David Jehová está luchando para que se investigue realmente sobre qué le sucedió a su chaval. Necesitarán apoyo, así como es indispensable la solidaridad organizada de personas presas, familias y allegados y la atención activa de toda la sociedad para que cese la impunidad. Si no se ha probado aún que David haya sido asesinado por los carceleros, lo cierto es que podría haberlo sido impunemente, porque el Estado tiende a cerrar todos los caminos, incluso los legalmente previstos, para llegar a saber lo que de verdad le ha sucedido. Eso tiene que cambiar y no lo hará si no nos organizamos para obligar a los responsables a que rindan cuentas. La familia, que ya convocó una concentración-manifestación ante la cárcel de Picassent el pasado 30 de agosto, no piensa parar hasta lograr «una investigación digna y justa, para poder aclarar toda la verdad» sobre la muerte de David Jehová, y prepara nuevas convocatorias, apoyada por varias asociaciones organizadas para ello en un comité.

FAMILIARES Y ENTIDADES EXIGEN QUE SE INVESTIGUE LA MUERTE DE 22 AÑOS EN PICASSENT

El 14 de julio, un carcelero encontró a David Jehová, en prisión preventiva desde mayo, colgado de una sábana anudada en un barrote de la puerta de la celda de aislamiento a la que le habían trasladado ese mismo día. La familia ha interpuesto una denuncia y exige una investigación en profundidad sobre la causa de la muerte.

La noche del pasado 14 de julio, Tamara Moreno recibía una llamada de un funcionario de la cárcel de Picassent (l’Horta Sud). El motivo: su hijo, David Jehová, de 22 años y en prisión preventiva por un delito de robo con intimidación desde el 1 de mayo de 2023, se había suicidado en la celda 14 del módulo 28 preventivos. Esa misma tarde, el hermano de David Jehová había acudido a la cárcel para visitarle, pero, según la familia, el funcionario le dijo que no era posible porque, a raíz de un incidente con un compañero de celda, el interno estaba en aislamiento. Lo que no le explicaron es lo que consta en el atestado de la Guardia Civil, al que ha tenido acceso la Directa: el funcionario con número de identificación 92.538 fue a buscar a David Jehová a su celda para avisarle de la visita. Entonces, se lo encontró colgado de una sábana anudada en uno de los barrotes de la puerta de la celda.

Los carceleros de Picassentl, tal y como consta en el escrito, trasladaron al joven a la enfermería para intentar, sin éxito, reanimarle, hasta que llegaran los Servicios de Asistencia Médica de Urgencias (SAMU). Posteriormente, avisaron a la policía y se personó el equipo de policía judicial y un médico forense, que certificó la muerte de David Jehová y ordenó el traslado del cuerpo al Instituto de Medicina Legal de Valencia, para examinarlo y determinar la causa. La Guardia Civil hace constar en el atestado que durante la inspección de la celda encontró un escrito de “despedida donde manifiesta su voluntad de quitarse la vida”, y una carta en un sobre cerrado dirigida a una mujer. Al día siguiente de recibir la noticia, Tamara Moreno interpuso una denuncia por la muerte de su hijo.

La familia desconoce cuáles han sido exactamente las pesquisas efectuadas para que, once días después de la muerte –el pasado 25 de julio–, la magistrada titular del juzgado de instrucción número 3 de Picassent, Juana María Gómez Valle, decretara el sobreseimiento provisional del caso. Consideran que en la decisión han prevalecido la carta de suicidio y el resultado de la autopsia. Según ha podido comprobar este medio, el informe preliminar del examen médico concluye que se trata de “una muerte violenta, […] compatible con un suicidio”, y que la causa fundamental ha sido la “compresión extrínseca de las vías áreas (colgamiento)”. Sin embargo, la familia considera que no se ha valorado el estado en el que recibieron el cuerpo: “Tenía la nariz rota, uno de los ojos hinchado y contusionado y los dientes cosidos como si hubiera sido sometido recientemente a una operación de reconstrucción”, denunció a Tokata, un grupo de apoyo a personas presas, a través de un comunicado el pasado 24 de agosto.

Ante las dudas, la familia encargó a Carlos Cuadrado Gómez, perito judicial y forense, una segunda valoración del cuerpo. El informe, al que ha tenido acceso la Directa, concluye que, considerando los vídeos sobre el estado del cuerpo aportados por los familiares, las fotografías de la autopsia y el atestado policial, “no es posible determinar si David Jehová se  suicidó o fue asesinado, pero desde un punto de vista médico legal, existen indicios de criminalidad que deben ser investigados”. Y apostilla: «El perito que firma no sólo no puede descartar la tesis homicida, sino que existen indicios para considerar la etiología mencionada en mayor probabilidad que el suicidio».

El perito afirma que existen diversas “incongruencias que permiten plantear la hipótesis de que David Jehová no se colgó, sino que podría haber sido asesinado”. Por ejemplo, que la lesión del cuello no puede haberla producido una sábana, “ya ​​que este tipo de material produce una abrasión amplia […], en lugar de una marca profunda y bien definida como parece percibirse en la fotografía”. Cabe destacar que, a diferencia del atestado, en el informe de la autopsia, no se hace referencia a una sábana, sino a un «lazo fabricado con la funda del colchón». El experto también manifiesta que no se aprecia cianosis –coloración azul en la piel por falta de oxígeno– en los pies y las manos, lo que es «habitual en un suicidio como el que se ha planteado». «La falta de cianosis –continúa– puede indicar que David no murió en la posición indicada, sino en la enfermería u otro contexto”. Asimismo, el rostro del joven presenta lesiones recientes, «de no más de 24 horas de evolución», tal y como afirma el perito y se observa en las fotografías que aportó la familia. En cambio, en el informe preliminar de la autopsia se afirma que «no se observan lesiones en la superficie corporal, ni contusiones, eritemas o lesiones de defensa y/o lucha».

Otra de las «incoherencias» que señala el perito es el tipo de autopsia efectuada. Aparte de examinar el cráneo, el cuello, el tórax y el abdomen, la médica forense diseca los dos brazos, práctica que, para Carlos Cuadrado, no es usual en los casos de suicidio y podría haber provocado la eliminación de «otros signos de violencia, en caso de que hubiera”. Desde la Asociación Abogados del Patio, que está trabajando en el caso, reclaman un careo entre el perito y la médica forense que le practicó la autopsia «para que se puedan aclarar las contradicciones».

La familia está recibiendo el acompañamiento jurídico y emocional de un grupo de organizaciones, encabezado por Garo techari-Plataforma Nacional por los Derechos Humanos e integrado por entidades como la Asociación Abogados del Patio o la Asociación para la Defensa de los Presos. El grupo de apoyo considera que es «imposible» que el juez pueda «haber ordenado y resuelto» todas las diligencias necesarias en tan sólo once días. Por eso ha recurrido el auto de sobreseimiento del caso. Piden saber si se han investigado cuestiones como si el funcionariado activó el protocolo establecido en caso de suicidio, cuánto tiempo tardaron en trasladarlo a enfermería, si el joven todavía presentaba signos vitales en el momento en que lo encontraron colgado, si había médico de guardia, o por qué éste no se trasladó hasta la celda. Con décadas de acompañamiento y apoyo a la población reclusa y sus familias a sus espaldas, Fernando Garcia, miembro de Tokata, denuncia que la asistencia sanitaria en los centros penitenciarios es “mínima”: “En el Estado español, uno 66% de las plazas de médico penitenciario están vacantes. Muchas veces, no existe un médico de guardia permanente y, en el caso de los presos en aislamiento o en primer grado, los médicos suelen ser muy reacios a visitarlos”.

En aislamiento

La familia y el grupo de apoyo también exigen que se investigue el presunto incidente entre David Jehová y otro preso, que se revisan las grabaciones de las cámaras entre las diez de la noche del 13 de julio y las ocho de la tarde de el día siguiente, y que se recogen los testigos de internos (presos y funcionarios). Según el atestado policial, el joven ingresó en una celda de aislamiento tras el almuerzo del 14 de julio, a causa del supuesto incidente con otro interno. No se da ningún detalle más. Por su parte, la familia habría conseguido el testigo de uno de los presos, que les aseguró que el día en que David Jehová murió, habrían irrumpido en su celda tres funcionarios al grito de «cacheo» y preguntando sobre el lugar donde escondía “droga” y “un teléfono móvil”. Según relata el recurso, el testigo les aseguró que los funcionarios, “al no encontrar lo que buscaban, sacaron de la celda a David y le trasladaron esposado a una habitación donde fue apaleado brutalmente con el objetivo de obtener una confesión”.

Jordi Buzón Cateura, de la Asociación de Abogados del Patio subraya que “el hecho de que todavía no hayamos podido revisar las grabaciones de las cámaras y que intentan dar carpetazo al caso tan rápidamente nos hace pensar que hay una opacidad por parte de los juzgados e Instituciones Penitenciarias”. Por su parte, Francisco Saavedra, representante y portavoz de la Plataforma, incide en que «persistirán en la lucha por hacer justicia a la muerte de David Jehová». La madre de David también ha enviado una carta a los juzgados de Picassent para pedir «una investigación digna y justa, para poder aclarar toda la verdad de la muerte de mi hijo».

El recurso fue admitido a trámite y están a la espera de conocer la resolución. Por su parte, desde el gabinete de prensa de Instituciones Penitenciarias del Ministerio de Interior español, han declarado a la Directa que «se han activado los protocolos», pero no pueden ofrecer más información porque «el caso está judicializado».

Desde el Observatorio del Sistema Penal y los Derechos Humanos (OSPDH), su director y profesor de Derecho en la Universidad de Barcelona, ​​Iñaki Rivera, denuncia que no se investigan suficientemente las muertes en las cárceles: “No se aplica el Protocolo de Minnesotta –aprobado por Naciones Unidas en el año 2016–, que obliga a los estados a llevar a cabo una investigación forense mucho más cuidadosa y profunda, como realizar una segunda autopsia, la custodia de las pertenencias de la persona muerta, tomar declaración a los testigos de forma inmediata o el derecho de la familia a estar informada de la muerte, las circunstancias…”. En la práctica, según Rivera, «normalmente, las muertes se archivan sistemáticamente». «Existe una falta de voluntad política para no investigarlas en profundidad, aunque el protocolo atribuye a los estados la responsabilidad de la vida y la muerte de las personas bajo custodia», concluye.

La cárcel mata

Actividad en la calle

David Jehová Hiruela Moreno, de 22 años, estaba preso en un departamento de castigo especial por aislamiento de la cárcel de Picassent, uno de esos lugares donde reina la violencia brutal y la impunidad en su ejercicio de los carceleros. El 14 de julio, su madre recibió una llamada de la cárcel. Le dijeron que su hijo se había ahorcado. Pero, cuando los familiares pudieron ver el cadáver, descubrieron que, entre otras evidencias, tenía la nariz rota, uno de los ojos hinchado y contusionado y los dientes cosidos como si hubiera sido sometido recientemente a una operación de reconstrucción. En consecuencia, la familia está convencida de que David ha sido torturado y después ahorcado por los mismos carceleros que supuestamente lo custodiaban. Han iniciado ya las acciones legales para denunciar los hechos, pero quieren darlos a conocer también públicamente. Por eso han convocado una primera concentración-manifestación frente a la macro-cárcel de Picassent (Valencia). Su intención es continuar luchando hasta asegurarse de que el asesinato de su muchacho no queda impune. También piensan en el resto de personas presas, de las que mueren anualmente alrededor de doscientas, muchas de ellas en circunstancias muy sospechosas, imposibles de aclarar por la resistencia a investigarlas de las autoridades a quienes correspondería legalmente hacerlo. Esperan la asistencia de familiares y amistades, tanto de David como del resto de la gente presa, y de personas solidarias y enemigas del poder punitivo del Estado.

¡CONTRA LA VIOLENCIA INSTITUCIONAL! ¡CONTRA LA IMPUNIDAD! ¡BASTA DE TORTURAS Y ASESINATOS EN PRISIÓN!

 

La cárcel mata Cárcel=Tortura

Publicamos tal cual ella nos lo ha enviado, pero sin señas particulares, como nos ha pedido, el relato que con gran sensibilidad nos hace una compañera anticarcelaria sobre un tristísimo suceso. Como ella nos dice, una persona más asesinada por la cárcel. ¡Muerte a la cárcel!
Hola.

Antes de nada me presento. Me llamo Xxxx y simplemente soy una chica con ideas anticarcelarias. Me he atrevido a contactar con vosotrxs porque ha ocurrido un triste suceso que creo que no ha trascendido mucho.

Un chico que había salido de la cárcel se ha quitado la vida. Estaba viviendo en un piso que tiene el cura del barrio Yyyy (Salamanca). Este cura acoge en la casa parroquial a ex presos y después algunos se van a casas de su propiedad. Este chico estaba junto con otros en un piso un poco más abajo del barrio Yyyy, hacia Zzzz. Por la parte trasera pasa el tren y allí es donde decidió suicidarse.

Al principio, cuando nos enteramos de la noticia, no sabíamos quién había fallecido, ya que el chico no tenía familia y hablaba poco, aunque había estado acariciando el día anterior a la galga de mi hermano. Lo supimos un poco después por su compañero de piso. También por él (y por otros que ya se han ido de esta zona) sabemos que los chicos que acoge el cura tienen unas normas algo restrictivas, además de trabajar en los proyectos del cura sin recibir un sueldo completo, lo que no les permite ser totalmente libres. No se atreven a hablar públicamente, así que os pido que tampoco se publique esto que os cuento, al menos no con referencias a personas o lugares concretos.

El chico que se ha suicidado salía todos los días a correr, pero según su compañero de piso le afectaban esas normas restrictivas. Si me pongo en su lugar, creo que lo que más deseas tras la experiencia traumática de la cárcel es la libertad total. Ojalá hubiéramos hablado más con él. Me da mucha pena lo que ha sucedido. Creo que no exagero si afirmo que la cárcel ha matado a otra persona más.

En fin, gracias por leer mi mensaje a pesar de ser tan extenso. Me parecía importante que se conozca este caso.

Os dejo el enlace de la noticia, aunque ahí no se dan detalles:

https://www.lagacetadesalamanca.es/sucesos/muere-arrollado-tren-tejares-20230721155936-nt.html

Un abrazo,
Xxxx

La cárcel mata

Actividad en la calle

En esta edición de «Gritos del silencio», de Radio Vallekas, entrevistan a Daniel Pont, el cual repasa sus años de cárcel en el franquismo y primeros años del régimen presente y, durante éstos, su participación en la COPEL. Añade algo más de leña a la hogueruela de la «discusión» sobre lo sucedido en el penal de El Dueso, donde habían sido trasladados como castigo 500 presos en lucha, a primeros de abril de 1978, cuando fue allí a escenificar su apertura al diálogo el recién nombrado director general carcelero, «Don Carlitos de la Mancha», durante el mandato del cual el Estado logró acabar, mediante el engaño «democrático», la represión más violenta y la tortura, con la lucha de los presos sociales por la amnistía y el indulto general.

Vagos y maleantes Radio: otros programas

En el programa Gritos del silencio, de Radio Vallekas, entrevistaron a uno de nuestros compañeros que participó en su día en la lucha social que se conoce bajo el nombre de COPEL, entre otros temas, sobre su experiencia, reflexiones y opiniones al respecto, parte de las cuales, al parecer, molestaron tanto a un conocido militante de esa organización que decidió replicarle públicamente, cosa que ya había hecho, por otra parte, cuando nuestro compañero hizo pública una crítica sobre la película Modelo 77, cuyo contenido tampoco le pareció bien. Publicamos en primer lugar la transcripción de los fragmentos de la entrevista que pudieran ser objeto de esta polémica y enseguida las puntualizaciones del hombre de la COPEL.

UNA PERSPECTIVA SOBRE LA COPEL UN POCO DIFERENTE DE LA “OFICIAL”

«Ahora que se ha hecho una película, una superproducción sobre la COPEL, o que hay unos chavales que hicieron un corto y quieren hacer una serie, y que anteriormente se hizo el documental este del que habéis estado poniendo la banda sonora (…) y también el libro “Cárceles en llamas”… pero, bueno, cuanta más leña, más fuego ¿no? Yo, a todos estos productos, menos quizás el corto, les haría una crítica: que ven la COPEL como un movimiento centrado completamente en Carabanchel, por el cual, desde el centro y desde arriba, se moviliza al resto de las cárceles. Y esa es una visión que, además de ser más bien leninista, no responde a la verdad, porque en tiempos de la Transacción la reivindicación principal de la lucha de los presos, que era la amnistía, un rasgo muy importante de esta lucha, que es decir, y luchar desde ahí, que los presos, todos los presos, son presos políticos, que la cárcel es un hecho político que afecta a los pobres, a los que levantan la cabeza, claro, y también es un mecanismo de regulación de la fuerza de trabajo y del sistema de control social. Y en esa lucha se hizo eso, pero se hizo, no desde una minoría que movilizó a los demás, sino que el impulso a luchar por la amnistía, cuando se veía la oportunidad de conseguirla, venía de abajo y estaba generalizado en todas las cárceles. De hecho, en la COPEL… bueno, en la COPEL no, en el movimiento de los presos sociales durante la Transacción, si se hace un cálculo por encima, participaron de 3.000 a 5.000 presos, de 12.000 que había. Y se puede decir que en cada prisión, con COPEL o sin COPEL, había un núcleo de gente muy inquieta que estaba dispuesta a tirar para adelante, pero también había cientos de presos dispuestos también a tirar para adelante por la amnistía, además de las otras reivindicaciones. Porque, claro, el sistema penal era brutal, injusto, estaba basado en la tortura, en las causas amañadas y, luego, existía la LRPS (Ley de Rehabilitación y Peligrosidad Social), que era una ley que te metían preso por tus actitudes, por tus costumbres, te ponían en manos de los carceleros y de jueces especiales que eran fascistas… en fin, que era una situación muy injusta.

Entonces, la gente presa, durante la Transacción, veía la oportunidad de luchar también por sus reivindicaciones, como estaba luchando en la calle, por ejemplo, el movimiento obrero asambleario, que estaba poniendo en un brete al Estado y al Capital. Y, bueno, que la COPEL sí que desempeñó un papel muy importante de catalizador, de avanzadilla; hicieron un análisis muy claro, con ayuda de los abogados jóvenes, del sistema penal, desde el punto de vista jurídico y político, y tuvieron un papel muy importante, muy positivo. Hasta que empezaron a tenerlo negativo; precisamente por esa condición de vanguardia, hubo un momento en que se salieron de madre, se equivocaron y en lugar de contribuir a que el movimiento continuara, contribuyeron, más bien, a que se interrumpiera. Esta es una cuestión polémica, pero hacer de la COPEL un mito, sin hacer autocrítica, sin reflexionar minuciosamente sobre lo que estuvo bien y lo que estuvo mal, es un poco renunciar a la lucha, porque, si la lucha continúa, se tiene que saber potenciar lo que estuvo bien y minimizar lo que estuvo mal. Entonces, hay que someter a crítica ese papel de dirigentes incontrolados que de pronto perdieron la lucidez y pensaron que el resto de presos se habían desmadrado y que ellos tenían que rectificar, y se pusieron a negociar, como un sindicato cualquiera, con el nuevo director general, con Carlos García Valdés, que es el malo de la película, el pacificador, el que terminó con el movimiento, el que metió a más de mil presos en régimen especial de castigo, con los antidisturbios encima, el que ordenó las torturas y las defendió y las camufló todo el tiempo, y que elaboró esta LOGP en la que, con sus correspondientes reglamentos, se legaliza la tortura, y en la que los derechos de los presos están negados, porque lo que se da con una mano se quita con la otra, y está blindado el régimen especial de castigo, con la colaboración de los jueces, de los mass media, de los partidos y de prácticamente toda la sociedad. En fin, que yo creo que sí, que hay que volver una y otra vez sobre este tema, porque todavía hay muchísimo sobre lo que reflexionar.»

«A ver, lo primero es que este tema de los traslados, la dispersión, la concentración en un sitio… es una herramienta que siempre la ha utilizado el Estado para intentar reprimir las luchas, unas veces le ha salido mejor, otras veces le ha salido peor. Esto de El Dueso, lo hizo Jesús Haddad, que era un director general que iba de socialdemócrata, pero terminó, como García Valdés, con medidas represivas. Bajo su mandato, por ejemplo, asesinaron por la tortura a Agustín Rueda. Pero también dictó esta medida de coger a 500 o 600 presos de todas las prisiones del Estado, que ellos decían que eran de COPEL, pero en realidad no lo eran. Eran lo que te digo, eran la gente que se había significado más en la lucha por los derechos de los presos y por la amnistía. Entonces, los llevaron allí de mala manera, era una especie de Guantánamo, vestidos con un mono y unas chanclas, con la cabeza rapada… les desinfectaron con zotal, les pegaron, en el viaje, en la cunda, y, cuando llegaron allí, pues nada, al celular, con los antidisturbios dentro y paliza va, paliza viene. Lo que pasa es que, estando esta gente allí, los GRAPO se cargaron a Jesús Haddad y nombraron como director general a García Valdés que como que tenía un prestigio como reformista, democrático, etc. y un talante, por lo menos al principio, dialogante. Entonces, lo primero que hizo fue acercarse a El Dueso a hablar con los supuestos dirigentes de la COPEL, que te digo yo que no lo eran, que allí sí que había gente de los que habían iniciado la COPEL, pero también había mucha otra gente que solamente eran COPEL en la medida en que se habían identificado en algún momento con la propuesta de COPEL. Pero, desde luego, COPEL no era una “organización”, ni tenía afiliados, ni militantes, ni carnets, ni estructura jerárquica de ninguna clase… no tenía ninguna estructura. De hecho, era un grupo, el de Carabanchel, que también era un grupo heterogéneo, que era muy audaz y tenía las cosas muy claras y como que iba por delante y, entonces, la gente de abajo se identificaba y decía “joder, pues estos van por buen camino”, y entonces se movilizaban ellos, como pasó el 18 de julio, en la “batalla de Carabanchel” que en unos tres días hubo veinte motines en veinte prisiones diferentes. Pero eso no fue porque la COPEL se hubiera extendido, sino porque los grupos de presos estaban ahí.

Bueno, después de eso, hubo toda una lucha, hubo toda una serie de motines que ya no estaban centrados en Carabanchel, sino en todas las cárceles, que iban subiendo y bajando según se discutía, por ejemplo, la última amnistía, la amnistía de octubre del 77, que terminó siendo una ley de punto final en la que se amnistiaba a los torturadores, a los asesinos del franquismo, pero no se amnistió a ningún preso social. Bueno, pues mientras se discutía la amnistía había motines por la amnistía en muchas cárceles, y cuando la amnistía se frustró, bueno, se frustró no, cuando estuvo claro que ya no se la iban a dar a los presos sociales, cuando estuvo claro lo que era, una maniobra del régimen franquista para lavarse la cara y pasar a otra etapa, lo que Agus llama el borbonismo. Entonces, hubo una serie de motines de rabia y después salió la proposición de ley de indulto de Juan Mari Bandrés y Lluis María Xirinachs y, entonces, mientras se discutía esto, volvió a haber motines por el indulto, motines totalmente espontáneos, que no los dirigió la COPEL ni llevó la iniciativa Carabanchel, sino que sucedieron en muchas prisiones sin haberse puesto previamente de acuerdo de ninguna manera, simplemente por solidaridad, por efecto de la solidaridad y de la acción directa. Bueno, pues cuando Haddad decidió diezmar las filas y llevar a 500 a El Dueso había habido una oleada de motines por el indulto y, como estaba claro que el indulto iba a ser rechazado en el senado, ellos dijeron “vamos a coger a todos estos y vamos a concentrarlos ahí con los antidisturbios y demás, para evitar que las cárceles ardan cuando el indulto sea rechazado en el senado». Y esa fue la maniobra. Lo que pasa es que, cuando mataron a Jesús Haddad, hubo una apariencia de que todo iba a cambiar y, entonces, soltaron a los presos que estaban en régimen celular en El Dueso, los dejaron salir de celular, los dejaron participar en una especie de simulacro de cogestión, y entonces llegó García Valdés. Y García Valdés venía avalado por los abogados jóvenes y se le consideraba reformista y tal y, entonces, él quería hablar solamente con Daniel Pont que, para los medios de comunicación y para él, era el líder de la COPEL, lo cual no era verdad, la COPEL no tenía líderes ¿eh? Entonces, Daniel dijo que no, que con él solo ni de coña y, entonces, hicieron una asamblea, pero que yo sepa no fue una asamblea de los 500, ni mucho menos, y fueron como quince a discutir con García Valdés.

Y, después de esas discusiones, salieron unos comunicados… que había que aplazar la reivindicación del indulto general, que había que darle un voto de confianza a este señor… En fin, comunicados que daban un giro reformista, y se hablaba de autogestión, pero en realidad lo que llamaban autogestión era la cogestión que proponía García Valdés, y se hablaba de negociación, de medios pacíficos, de abandonar la violencia… Y, bueno, eso sólo duró dos o tres meses, porque, claro, ahí se generó un escenario que era más bien ficticio, porque los presos no querían negociar, sino que fingían hacerlo y, mientras, intentaban fugarse. Y hubo una serie de fugas y de intentos de fuga… Porque esto se hizo en todas las prisiones, una vez más, sin ponerse previamente de acuerdo.. Y, entonces, hubo una serie de fugas, hasta la de los 45 de Barcelona. Entonces, García Valdés empezó con las circulares y con los traslados a los celulares de Burgos, Ocaña, el Puerto de Santa María, Huesca, Cartagena, etc. de manera que todos los que levantaban cabeza fueron a parar allí, con los antidisturbios dentro y recibiendo al menos una paliza diaria, durante meses. Claro, la COPEL ya no se pudo recuperar de este traspié reformista que había tenido… y, bueno, entonces sí que irrumpió de verdad la heroína y todo eso. Pero, cuando irrumpió la heroína, García Valdés ya había conseguido dividir a los presos, a la base separarla de los supuestos dirigentes, a los supuestos dirigentes dividirlos entre ellos y, finalmente, escoger… en este caso ya no serían quinientos, serían mil o mil y pico quienes fueron trasladados a los celulares. Y ahí se acabó la COPEL. Porque, claro, la gente se quedó con los últimos comunicados, que fueron varios. Todos esos comunicados se pueden ver y se pueden analizar, cosa que habría que hacer con detalle ¿no? Y, bueno, la gente, la base, se quedó con la idea de que la COPEL había negociado, de que la COPEL se había pasado al bando de García Valdés. Aunque no era así, porque eso sólo era apariencia. Pero, como la peña ya estaba en los celulares, aislada del resto y machacadísima, recibiendo como os digo una paliza diaria, mínimo, pues ya no se pudo reconstruir, no sé, el movimiento, esa concordancia entre los más listos, los más audaces, y la base. Y ahí se desarticuló, por así decirlo, la lucha social.»

«Durante todo este tiempo, de la COPEL a acá, que ya he explicado al principio que no ha dejado de haber luchas y que las luchas nunca han olvidado a la COPEL, porque siempre han resonado la estrategia y las tácticas de la COPEL en la lucha (…). De lo que se trata es de que, mirando hacia allá, veamos a ver si puede volver a haber la comunicación entre los de dentro, entre los de dentro y los de fuera y entre los de fuera que llegó a haber en aquel momento. (…) Porque lo que pasa ahora, que es consecuencia de aquello, es que las cárceles, en algunos aspectos, son peores que con Franco. Sobre todo, porque en la Transacción hubo un poco de luz y se vio la oportunidad de cambiar, pero es que ahora, en las cárceles, sí que está todo atado y bien atado, como decía Franco. Y esos nudos hay que deshacerlos o cortarlos, porque es una ficción, una sugestión, un efecto hipnótico, pero no es verdad, que no se pueda luchar contra las cárceles. Claro que se puede luchar. La condición es… luchar; es decir, que nos movilicemos mucha gente, que nos comuniquemos, que nos organicemos, que no nos dejemos manipular por los buitres que están siempre en este terreno, por los dirigentes, que siempre negocian entre ellos, y que tiremos para adelante ¿no?»

Fernando Alcatraz*

*Transcripción de algunos fragmentos de lo dicho en la primera parte del programa Gritos del silencio de Radio Vallekas dedicado  a la transmisión en directo de la jornada anticacelaria celebrada el pasado 17 de junio.

Para escuchar el audio correspondiente: http://tokata.info/jornada-anticarcelaria-y-presentacion-de-fundamentos-y-estrategias-de-la-copel-del-17-de-junio-en-radio-vallekas/

A continuación, la respuesta de Daniel Pont a las anteriores manifestaciones:

APUNTES ACLARATORIOS ANTE UNAS GRAVES ACUSACIONES

Una vez más, la definitiva, como ex miembro de la Coordinadora de presos en lucha (COPEL), desde su aparición en 1976 hasta el inicio de la Cogestión en la cárcel de Carabanchel en la que ya no participé, me veo obligado a responder a las graves y tendenciosas declaraciones Públicas hechas por Fernando hace pocos días en el programa “Gritos del silencio”, de Radio Vallekas de Madrid.

Son varias las declaraciones que hace, acusando a la asamblea de la Copel en la cárcel de El Dueso (Cantabria) de 1978, con ningún ánimo de debatir, sino hechas en un tono de sospecha, acusatorio, casi inquisidor, de haber cometido un grave error y, lo más tendencioso, de connivencia con el entonces director general de prisiones, García Valdés, al haberle dado un voto de confianza en el encuentro que se mantuvo allí. También reitera sus afirmaciones de que la “Copel” de Carabanchel-El Dueso se convirtió en vanguardia dirigente que propició la derrota de la lucha de los presos sociales en aquellos años.

Afirmo que nunca ha habido por su parte ninguna voluntad de establecer un debate sobre esta cuestión, al menos conmigo, pues siempre usaba los mismos tópicos acusadores y cerrados, en posición autoritaria, sin aceptar nunca la argumentación diversa que hice yo (y algún compañero más), sintiéndome forzadamente acusado y obligado a demostrar la honestidad de aquella asamblea de la que formé parte.

Como no quiero seguir con esta dinámica tóxica que no he creado, necesito puntualizar: Fernando no vivió desde su origen la intensa lucha de la Copel especialmente durante todo el año de 1977.  Tampoco estuvo en la cárcel de El Dueso: tuvo la “suerte”, junto a otros compañeros, de permanecer en la Modelo de Valencia en un régimen de vida muchísimo mas relajado que el que sufrimos los cientos de presos que fuimos trasladados a Cantabria en condiciones de brutal represión. Por lo tanto carece de la perspectiva necesaria para afirmar con la rotundidad que hace sus graves acusaciones. Tampoco le reconozco ninguna legitimidad para poder arrogarse esta supuesta autoridad moral.

Su argumentación la basa en los documentos difundidos por la Asamblea de presos de El Dueso en 1978 y en el encuentro que tuvimos 15 compañeros con el Garcia Valdes. Pero no tiene en cuenta otros documentos también debatidos en asamblea y difundidos a otras cárceles para su aceptación o no y que recoge César Lorenzo en su libro de “Cárceles en llamas: el movimiento de presos sociales en la «transiccion”.

Aunque sin mencionarme claramente en sus declaraciones en el programa de radio, me siento directamente implicado en sus graves acusaciones al ser integrante de la Asamblea de la Copel en el Dueso. Y me siento muy dolido por su reiterado papel de acusador, sin que haya demostrado nunca la menor empatía o capacidad de comprensión por las decisiones que aprobamos y difundimos.

Antes me permito hacer una breve observación respecto al origen y funcionamiento de la Copel: surge como COORDINADORA de presos, nunca como organización jerárquica o vanguardia dirigente de los presos. Sus afirmaciones son muy tendenciosas y manipuladoras, pues está más que demostrado que muchas cárceles funcionaban con total autonomía para tomar sus decisiones. La Copel, al principio solo ayudó a crear las condiciones para hacer efectiva una comunidad de lucha por unas reivindicaciones colectivas. Y lo hizo en una situación de miedo e individualización absolutas. Por un trabajo persistente de agitación y propaganda por todos los medios posibles, dedicando infinidad de días y de métodos para conseguir esa COORDINACIÓN, que finalmente se logró. Nunca desde una perspectiva dirigente o de Vanguardia, pero sí siendo consciente de que teníamos que aceptar “ dar la cara” o tener cierto protagonismo. Desgraciadamente siempre son necesarios lxs audaces…

A nivel personal viví individualmente algunas situaciones ilustrativas, de las que relato estas dos y que pretendían convertirme en “monigote líder”: En el motín del 18 de Julio de Carabanchel de 1977, tras resistir heroicamente los compañeros de los tejados de Carabanchel, un buen grupo de ellos me propusieron ser intermediario único en el dialogo que se proponía con el Ministerio del Interior y la Dirección General de Prisiones. Me negué y propuse a los compañeros de la Copel de la Rotonda-6ª galería crear una comisión. Con alguna resistencia a “dar la cara”, se consiguió crear una comisión de 5 compañeros entre los cuales lo estaba. Como también relata Fernando, cuando García Valdés se presenta a la cárcel de El Dueso, estando en el comedor colectivo cientos de presos, el subdirector de la cárcel me notificó que el Valdés quería entrevistarse conmigo: le respondí que yo no representaba a nadie, que éramos una COORDINADORA colectiva y que necesitábamos crear una comisión representativa de 15 compañeros. Finalmente creo recordar que se creó una comisión de 10 compañeros de varias cárceles del estado. En dicha reunión, SÍ, LE DIMOS UN VOTO DE CONFIANZA, pero también le apretamos las clavijas: un compañero le dijo “Carlitos, esperemos que cumplas tus promesas, si no, recuerda lo que le ha pasado a Haddad” (anterior director general de prisiones muerto en atentado reivindicado por los GRAPO). Esto Fernando lo sabe, pero o lo olvidó o no cree necesario utilizarlo. Nosotros consideramos que no fue un error y así lo apoya un compañero también ex fundador de la Copel que ratifica la honestidad de la Asamblea de El Dueso.Y lo hicimos así por varias razones: el retroceso táctico que sufrimos, especialmente los cientos de presos de El Dueso y las durísimas condiciones en que estábamos. Las fugas que sabíamos se estaban trabajando en varias cárceles. El fin de la lucha por la Amnistia en Octubre de 1977 que cerraba cualquier posibilidad,  plasmado en la Constitución que aprobaron en diciembre de ese año. La derrota de la propuesta de Indulto planteada por un reducido grupo de senadores vascos, catalanes y algún independiente. La constatación del aumento del consumo de heroína, incluso entre compañeros luchadores y la práctica frecuente de los abusos y violaciones que habíamos combatido: yo mismo presencié el enfrentamiento a puñaladas en El Dueso entre varios presos ya yonkis y de los GIL (grupo de incontrolados en lucha). El desmadre y el caos que progresivamente se iba apoderando de las prisiones y que César Lorenzo también relata y que Fernando tampoco considera en su relato acusatorio. El desmadre y el caos, obviamente beneficiaba a los carceleros reaccionarios y torturadores, al Gobierno y los medios para desprestigiar a la Copel. Y la creación de motines sin ninguna reivindicación colectiva en alguna cárcel, que solo beneficiaban al enemigo.Como ejemplo, aunque ya tardío, el último motín que sucedió en la cárcel Modelo de Barcelona, creo recordar en los años 80, “El Vaquilla” como interlocutor entre los presos y las autoridades pidió varios gramos de caballo y delante de las cámaras se metió un buen chute…

Ante este panorama tan desalentador y desolador, la Asamblea de El Dueso PROPUSO una reflexión para un necesario cambio de táctica-estrategia que intentase superar la crítica fase en la que estábamos en las cárceles. La otra alternativa era avanzar hacia la segura masacre, a la que Fernando parece que era partidario, que en aquella cárcel teníamos muy presente con las compañía de antidisturbios especiales que había permanente. Y que en otras cárceles se manifestó con la muerte de varios/as compañeras/os.

El voto de confianza que dimos al García Valdés supuso en pocos días la recuperación progresiva de mejores condiciones de vida en las cárceles: aprobación de los “Vis a vis”, salidas de permisos por enfermedad, defunción, nacimiento o bodas, la modificación de la Ley de cuantías en los delitos, la despenalización de las huelgas de hambre y autolesiones… En ese contexto la asamblea de El Dueso, PROPUSO una jornada de lucha de huelgas de hambre y autolesiones o ingestión de objetos metálicos a todas las cárceles que pudimos para el día 10 de mayo de 1978, coincidiendo con la semana pro-amnistía de Euskalherría. El día 8 como golpe estratégico en El Dueso nos autolesionamos 100 presos y unos cuantos ingerimos objetos metálicos. A algunos nos trasladaron al Hospital de Valdecilla de Santander e intentamos la fuga: solo lo consiguió un compañero que a las pocas horas fue detenido dando vueltas por las calles. A esta convocatoria se sumaron cientos de presos en unas 25 cárceles a lo largo de ese mes de Mayo. En esas semanas se produjeron varias fugas: 3 en el Dueso (de la que fui obligado protagonista para crear una maniobra de diversión…), 8 en Burgos, varios en Carabanchel…hasta los 45 de la Modelo de Barcelona. Intentos de fuga y túneles también unos cuantos… Y efectivamente, el García Valdés tuvo razón en sus declaraciones: “ los presos de la Copel me engañan: de día dialogan y de noche cavan para fugarse”.

Todo eso fue por la decisión de DAR UN VOTO DE CONFIANZA ESTRATÉGICO al García Valdés. Como afirma Fernando en sus declaraciones, teníamos esa doble estrategia: o Amnistía para conseguir la libertad o conseguirla por las fugas. Una flagrante contradicción que tiene, que obedece , quiero pensar, a despiste.

Finalizo: cansado de tener que estar argumentando una y otra vez ante un muro, sin encontrar la mínima capacidad de comprensión y de estar harto de representar el papel de acusado por un omnipresente acusador, me reafirmo en el papel responsable que tuve como miembro de la Copel desde su origen, de que la Asamblea de la Copel tanto en Carabanchel, como en El Dueso y otras duras cárceles que sufrí, jamás fue Vanguardia de nada, ni dio un voto de confianza al Valdés que supusiese alinearnos con él, ni mucho menos fue responsable de la derrota de la lucha de la Copel. Cualquier persona que tenga interés puede comprender lo que aquí se relata, añadiendo la fortaleza del estado en aquellos años y la aprobación del Plan Quinquenal de sustitución de las antiguas cárceles panópticas por el nuevo modelo modular cuyo exponente mas claro quedo reflejado en la cárcel de Herrera de la Mancha, todo un símbolo de los tiempos que se avecinaban.

Nunca pensé que acabaría así esta interpretación de “los sucesos de El Dueso”. Pero he llegado al limite de no soportar más mierda tóxica que solo consigue desgastar y dividir las exiguas fuerzas tan necesarias en este combate sin fin de la Abolición de las cárceles algún día utópico.

¡SALUD!

Daniel

El 4 de julio de 2023 incluimos el siguiente texto publicado en una red social con el que Agustín Moreno Carmona, como ya lo hizo en octubre de 2022, ha decidido participar en esta «discusión».

APORTACIÓN A «UNA ESPECIE DE ‘DEBATE’ SOBRE LA COPEL»

Vamos a hablar claro, con nombres y apellidos. Tú eres Fernando García Morales, Alcatraz, que no hace falta que te disfraces de Tokata. Eres tú quien participó en la entrevista de Radiovallekas.

Alcatraz nunca estuvo en el Dueso y sus compañeros de causa tampoco. Todo lo que sabe de la Copel se lo han contado los copelianos.

Se desconoce que el entrevistado fuera miembro de la Copel, pero pudiera serlo de Valencia porque la Copel se extendió a todas las cárceles. Fue la Copel quien movilizó a miles de presos que no estaban movilizados. Para ello utilizó las comunicaciones orales, escritas y actos revolucionarios.

Abogados, familiares y los copelianos dispersados elaboraron el proyecto.

El entrevistado habla, sin conocimiento de causa y sin precaución, que para personas anónimas «la Copel fue un movimiento centrado completamente en Carabanchel, por el cual desde dentro y desde arriba, se moviliza al resto de las cárceles». Eso es una manipulación que contagia, porque el entrevistado debe de hablar de sus conocimientos en lugar de citar a desconocidos. Por eso presenta el tóxico de que los anónimos ven a la Copel con visión LENINISTA. Entre bandazo y bandazo deja entrever la corrosión al movimiento porque Alcatraz no tiene ni idea de la Copel y algo sin sentido tiene que decir.

Desde los sucesos de Herrera de la Mancha, a partir del 18 junio de 1979 y hasta la tardía reforma del Código Penal, Julio de 1983, no hubo miles de presos reivindicando ésa reforma parcial. Los presos estaban mudos en ésa época. Los miles de presos se habían movilizado antes, concretamente quienes gestaron la reforma fueron los presos de la Copel, que muchos de ellos estuvieron secuestrados por el borbonismo hasta las cuantías de 1983. Fue así porque la «democracia» nunca reconoció a las víctimas de la dictadura.

Alcatraz ve negativa a la Copel del Dueso por su condición de vanguardia. No dice bajo que dirección ideológica política cuando la lucha es el único camino.

Tampoco estuvo allí para aseverar que hubo un momento que se salieron de madre. Alcatraz habla de sus marcianitos. Y Alcatraz remata que «en lugar de contribuir a que el movimiento continuara contribuyeron más bien a que se interrumpiera». Parece que Alcatraz estaba plácidamente en la cárcel provincial de Valencia, no suicidándose contra un muro en lugar de atacar a quienes llevaban mucho tiempo peleando contra los violentos. Nos viene a decir que quienes no tuvieron derecho a la palabra y la tomaron con mucha precariedad, en el Dueso eran un supercomando de marines con formación política anarquista en lugar de tener la formación muy limitada como era la verdad en las víctimas del franquismo. Por lo tanto el entrevistado prohíbe que las personas puedan cambiar de opinión. Alcatraz confunde sus deseos con la realidad porque padece el síndrome de la verdad completa.

Dice Alcatraz que «la Copel tuvo el papel de dirigentes incontrolados que de pronto perdieron la lucidez y pensaron que el resto de los presos se habían equivocado y se pusieron a negociar como un sindicato cualquiera con García Valdés». Que gran telepatía para meterse en el pensamiento de la asamblea de la Copel y del resto de los prisioneros del estado. Y también que poco respeto tiene éste representante de la ficción a las personas que atacaron al sistema desde el lugar más vulnerable y con tanto dolor acumulado. El síndrome de la verdad completa también lo es de la jefatura. Los copelianos no necesitamos que nos represente nadie.

Otra fantasía, que García Valdés «cogió a 500 o 600 presos que ellos decían que eran de la Copel pero que en realidad no lo eran». De nuevo vuelve la magia a trastear con su imperialismo desastroso.

La Copel tenía militantes muy bravos. La Copel se extendió universalmente desde el motín del 18 de julio en Carabanchel, porque sin éste acontecimiento no hubieran existido las revueltas carcelarias de racimo referenciadas por la Copel y sus reivindicaciones. Además había propaganda subversiva por la propaganda diversa que llegaba a las cárceles, por el motor indiscutible de Daniel Pont. Minimizar a la Copel es un problema mental. Además Alcatraz tiene un déficit de comprensión.

Nunca me gustó hablar de mi, pero daré algún dato.

La cárcel de Cáceres se revolucionó a consecuencia del motín de Carabanchel. Los presos uniformados hasta el último botón se arrancaron el traje de penado, se dejaron barba, pelo largo y destruyeron la disciplina militar declarándose de la Copel.

También participé en la coronación del tejado de la cárcel de Sevilla, motín de la Copel en el Otoño de 1977. Con motivo de éste motín, la Audiencia me puso en falsa busca y captura (S.762/77-B Jdo.- 7) para que la policía anticopel me disparara por delincuente en ejercicio, que no lograron el propósito porque estaba refugiado en Francia.

Participé en la mayoría de las luchas duras de la Copel, pero nunca vi por allí a Alcatraz.

Todo ésto viene de lejos, que Alcatraz está obsesionado con atacar a mi compañero Daniel Pont, más o menos por haber traicionado a la Copel. Le he corregido muchas veces. Como Daniel estaba en la asamblea del Dueso, que para Alcatraz no es legítima porque es el dueño, no está de acuerdo que mis compañeros cambiaran de táctica, que debían de seguir sufriendo mientras que a Alcatraz no se le conocen actos revolucionarios anticarcelarios desde dentro de la cárcel.

Daniel Pont nunca ha sido líder. Es una persona con mucha capacidad de lucha, muy estratégico en el asalto a la cárcel de Carabanchel, pero también una persona de gran humildad. Es un buen compañero en los momentos difíciles.

Dicen que García Valdés no sólo visitó el Dueso, sino que también estuvo en la Modelo de Barna, Puerto de Santa María y Valencia. Pero también en Carabanchel. Desde el Puerto de Santa María me llevaron a Madrid. En Jefatura de Servicios estaba García Valdés. Me habló de pacificar las cárceles. Le repliqué de las contrapartidas de la Copel, que yo estaba solo y que debería de proponérselo a nuestra asamblea. De allí fue al Dueso.

Anteriormente en el Puerto me había visitado Jesús Hadad Blanco, con la misma propuesta y la misma respuesta.

Hablar mal de la asamblea del Dueso es hablar mal del libro que está vendiendo Alcatraz, concretamente de las páginas 135 a la 138. Como soy el autor, es hablar mal de mi.

El anarquismo se sustenta en 4 pilares: la Paz, la Comprensión, la Libertad y la Igualdad. Si falta uno de estos pilares, la ausencia lleva al autoritarismo.

Agustín Moreno Carmona

Debate sobre objetivos y medios de lucha Vagos y maleantes