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La población reclusa en cárceles españolas está, generalmente, enferma –»eso no lo niega nadie»– y, además, abandonada, pues no recibe los cuidados que necesita, teniendo en cuenta, por otra parte, que la vida en la cárcel mermaría considerablemente la salud de cualquiera, aunque estuviera bien cuidado. Pero no es así en ningún caso, sino todo lo contrario: desde los rutinarios malos tratos, la tortura impune y los regímenes de castigo en sus diversos grados, pasando por todo tipo de privaciones (sensorial, afectiva, relacional, cultural, etc.) o por la falta de higiene o el consumo fácil de todo tipo de drogas, hasta llegar a una desatención médio-sanitaria casi total, el paso por la cárcel consiste en verse sometido a un proceso de debilitamiento psicofísico que lleva a muchas personas a la muerte. De todo eso trata el siguiente texto, que nos ha llegado por correo electrónico sin que sepamos quién lo ha escrito, aunque quien sea parece saber de qué está hablando (posteriormente, hemos encontrado la versión en galego publicada en el portal anarquista pecoras.info). Describe con profusión de detalles los resultados de la «política sanitaria» que los gobernantes españoles han aplicado siempre, hasta hoy, en sus cárceles, y le da el nombre que merece: una política de exterminio. Así, coincide en gran medida con la visión del problema que vienen exponiendo lxs presxs en lucha en su tabla reivindicativa de 14 puntos y en el planteamiento de la huelga de hambre rotativa que está en marcha desde el 1 de septiembre para denunciar públicamente todos esos detalles concretos que hacen del sistema penitenciario español una máquina trituradora. Arriba ponemos un cartel en galego que se hace eco de la huelga de hambre rotativa y de los nombres de los presos en lucha que participan en ella durante este mes de septiembre.

DESATENCIÓN SANITARIA

La cárcel no sirve para cubrir carencias de salud y sólo contribuye parcialmente a las políticas de seguridad al inocuizar temporalmente a enfermos, discapacitados, toxicómanos y alcohólicos.

Más del 70% del personal en prisiones se dedica a vigilancia y un escaso 6% a tareas sanitarias. Falta personal, equipamientos y presupuesto.

El personal sanitario es el que debería preservar estos derechos; aún más, teniendo en cuenta la vulnerabilidad de sus pacientes.

Porque, que la población reclusa está enferma no lo niega nadie. Más de la mitad son toxicómanxs, otrxs tantxs tienen trastorno mental y en altos porcentajes padecen enfermedades crónicas tales como diabetes, insuficiencia crónica, epilepsia, asma… Además de enfermedades infecciosas y transmisibles como tuberculosis y VIH entre otras.

El 80% de lxs presxs consume psicofármacos y al menos el 40% drogas.

Más de 500 presxs se han suicidado desde el año 2000 y otrxs tantxs han muerto por sobredosis. Estas son las muertes mayoritarias y vienen a formar parte de las mal llamadas “muertes naturales”. Y, por supuesto, no entran en las estadísticas aquellxs que murieron en la calle al poco de salir en libertad por enfermedad grave.

Más que una política sanitaria lo que impera en la cárcel es una política de exterminio que se ejecuta con total impunidad. Los médicos se niegan a redactar los partes de lesiones cuando les golpean o les torturan. Sin olvidar la contención mecánica comúnmente conocida como camisa de fuerza, la cual forma parte del trato degradante de las torturas, dándose 7000 casos al año de modo regimental y provocando problemas médicos por opresión de los órganos o incluso un cuadro de hipoglucemia en el caso de una persona con diabetes.

En el caso de muerte o mejor dicho asesinato, los familiares se encuentran con ocultación de pruebas, informes falsos y grandes dificultades para que se realicen segundas autopsias.

Según los artículos 104.4 y 196 del Reglamento Penitenciario, existe una total violación del derecho que tienen los presxs de pasar sus últimos días de vida con los suyos.

El acceso de las personas presas a la sanidad en España es precario; tienen una salud extraordinariamente más quebrantada que las personas en libertad. El Estado no garantiza la salud de los presxs.

Los médicos de prisiones no dependen ni del Ministerio de Sanidad ni de las Consejerías de las Comunidades Autónomas, sino del Ministerio del Interior. La dependencia de los médicos al Ministerio de Interior hace difícil conjugar la normativa penitenciaria con el acto médico.

Existen diferentes programas según adicción o patología: dependencias para trastornos mentales, dependencias para toxicómanos, programas de prevención y control de la tuberculosis, programa de vacunaciones, programas de prevención de enfermedades de transmisión parental y sexual y de prevención y control de la infección VIH y hepatitis C, vigilancia epidemiológica de enfermedades transmisibles y no transmisibles, plan de prevención de suicidios… pero nada de esto se aplica.

En este clima, se hace imposible respetar los derechos del recluso-paciente, entre otros, el derecho a la intimidad ya la confidencialidad de las informaciones relacionadas con la salud, el derecho al consentimiento informado y a renunciar a un tratamiento, el derecho a unas condiciones básicas de salud y a una atención sanitaria aceptable.

Sería necesario eliminar los regímenes de aislamiento, perseguir y terminar con la impunidad para torturar y realizar tratos degradantes, establecer criterios para una penalidad racional en la duración y en la proporcionalidad, evitar la existencia de cadenas perpetuas, acabar con la dispersión como castigo a lxs presxs y a sus familias y dotar a las cárceles de una sanidad equiparable a la que disfrutamos las personas en libertad.

Todo médico tiene que velar por que no se cometa ningún abuso contra ninguna persona, pero queda patente la indefensión de lxs presxs que crean los servicios médicos dentro de los centros penitenciarios.

Abuso de opiáceos, descontrol en la repartición y dosificación de la medicación (incluso llegando a dar la medicación toda junta en caso de puentes y festivos) siendo conscientes de las sobredosis que se dan, del trapicheo de pastillas y de la consecuente generación de conflictos; pasar por alto y no diagnosticar enfermedades crónicas y muy graves, suministrar medicación forzosa mediante técnicas de engaño.

Si te encuentras enfermx y necesitas que te vea un médico hay que apuntarse un día antes, y quien decide poner en conocimiento del médico es el funcionario, el carcelero; es decir, depende de que te crea o no te crea.

El diagnóstico normalmente para todxs es casi el mismo. Siempre unx tiene dolores o duerme mal o va con problemas de metadona o psicológicos o psiquiátricos. Y como ya son conocidos los problemas, no les dan la importancia que se requiere. Y todo es rutinario.

Las enfermedades serias son diagnosticadas tarde o ni incluso eso. La exploración en la cárcel es visual. Y si sientes un dolor, paracetamol y, si no, ibuprofeno, y ya está. Te consideran enfermo crónico si eres drogodependiente, esta es la enfermedad que tienes y todos los problemas que vayas allí a exponer son “eso”, la drogodependencia.

El 70% de la población carcelaria está afectada psicológicamente y con tratamiento psiquiátrico. La mayoría de ellxs no saben lo que están tomando. Otrxs, que entran de la calle y tienen ya una medicación prescrita, allí se la quitan y le dan otra cosa parecida o no le dan nada. Porque luego entra el chantaje, el querer humillarte, que pases por el aro…

Incentivan el uso y abuso de metadona para mantener al “delincuente”, para controlarle en la cárcel y posteriormente en la calle. Porque una vez que sale, está controlado por el centro que lo dispensa y policialmente también. Y si les das problemas, te dan Modecate o Largactil, y te dejan neutralizado total, no puedes ni andar. Ahí es donde ya entra la destrucción consciente del individuo… ¿Y si te niegas a tomar la medicación psiquiátrica? Te cogen y te inmovilizan. Además estas medicaciones son adictivas y en algunos casos los efectos duran varios meses.

Existe medicación excesiva de manera intencionada. Para dormir se dispensan Transilium, Valium y medicinas derivadas de opiáceos las cuales te crean dependencia. Si te trasladan de cárcel, te cortan la medicación de manera radical. Si tienes un ataque de ansiedad, o tienes agobio o algún síntoma derivado de estar encerrado tanto tiempo… para eso no tienen ninguna medicación. Porque allí te dan una medicación cuando hay situaciones excepcionales, mientras no esté tu vida en peligro… aunque a ellos no les importe, pero tienen que justificar que han querido salvarte.

La enfermería como tal no existe. El hecho de la enfermería es como un justificante legal. Estás encerrado en vez de en una celda en la enfermería y vigiladx por otro preso, ya que el trato con el médico en la enfermería es escaso. Si tú no solicitas que vengan, allí no te revisa nadie.

Y no olvidemos la crisis del coronavirus que ha supuesto ansiedad, pánico, alejamiento y una mínima comunicación con familiares. En la cárcel el Estado de Sitio no es temporal, es constante.

La cárcel es para destruir, para degradar, para debilitar, para condicionar.

Por desatención médica sientes esa impotencia de que te puedes llegar incluso a morir, porque no te hacen caso.

¡Qué cese la complicidad de los médicos en la tortura!

Propuesta De Lucha Colectiva Para Ser Difundida Y Debatida Dentro Y Fuera (Renovada)

Huelga De Hambre Rotativa 2020

¡No Olvidéis A Lxs Presxs En Lucha! [Lista Actualizada, 02-09-2020]

Actividad en la calle Huelga de Hambre Rotativa 2020-2021 ¿Salud carcelaria?

El compañero Alfonso Miguel Codón Belmonte, que está participando desde enero de 2017 en las actividades de la propuesta colectiva de lucha en defensa de las 14 reivindicaciones que todos conocemos, inició ayer, 20 de mayo, una huelga de hambre de 10 días por motivos muy parecidos a los de la huelga colectiva de 15 días que se inició el pasado 1 de mayo. Suponemos que no le ha llegado la información a tiempo y ha querido de todas formas aportar su grano de arena. Miguel, que había participado del 10 al 20 de noviembre en la huelga de hambre rotativa por la excarcelación de las personas presas gravemente enfermas, ayunó también varios días cuando fue trasladado el 21 de febrero pasado a la cárcel de A Lama desde la de Villabona donde se encontraba, siendo encerrado sin sus pertenencias en una celda acristalada, después de que, al parecer, se intentara ahorcar utilizando la funda de una almohada. A raíz de lo cual, inició una huelga de hambre hasta que le devolvieran sus cosas. También ha enviado el resguardo de una instancia anunciando otro ayuno de 15 días, del 2 al 17 de marzo, pero, considerando que en esas fechas estaba aún en Villabona y que la instancia es de A Lama, nos parece que esa huelga debió producirse en abril y que el compañero se ha equivocado al poner la fecha, algo muy explicable, dada la situación de privación afectivo-sensorial que padece. Es evidente que este compañero tiene muchas ganas de luchar y sabemos que él se considera sin ninguna duda parte del colectivo de presxs en lucha, pero también parece que la información no le está llegando puntualmente. Hay que recordar, además, que Miguel ha protagonizado muchos intentos de suicido y que, dada su situación de salud mental, no debería estar en régimen de máximo castigo, que es donde lo tienen, por mucho que pretendan haberlo atenuado poniéndole totalmente solo en una celda acristalada y con una cámara que le controla las 24 horas del día. Por lo que habría que luchar –y no él solo, evidentemente– es por que le saquen de ahí, para ponerle en una situación adecuada a su estado de salud, es decir, en libertad.

Más información sobre Miguel en Tokata

Propuesta De Lucha Colectiva Para Ser Difundida Y Debatida Dentro Y Fuera (Renovada)

Noticias Sobre La Huelga De Hambre Rotativa De 2019-2020

Sobre La Huelga De Hambre De Mayo 2020

¡No Olvidéis A Lxs Presxs En Lucha! [Lista Actualizada, 29-IV-2020]

Cárcel=Tortura covid19 Huelga de Hambre Mayo 2020 ¿Salud carcelaria?

Las medidas de prevención son un endurecimiento de las condiciones de privación, aislamiento, crueldad, inhumanidad y degradación, bajo el cual el hipócrita paternalismo de las medidas preventivas frente a la epidemia resulta sumamente grotesco, con una sanidad penitenciaria en situación catastrófica desde mucho antes. El aislamiento y el hermetismo al que están sometidos los presos, la falta de medidas para prevenir contagios y la falta de información de lo que está sucediendo tanto dentro como fuera hace que se viva una calma tensa en todas las prisiones. En el siguiente audio, tomado de Kuartoscuro, nos habla del tema Iñaki Ribera Beiras.

covid19 ¿Salud carcelaria?

Leemos un texto de Miguel Amorós, «El Estado con mascarilla», lúcida visión de conjunto de la situación, muy útil para situarse sin ilusiones ante la «crisis del coronavirus». Hablamos con Libertad Francés, de Salhaketa Nafarroa, de las críticas y reclamaciones hechas públicas por algunas asociaciones defensoras de los derechos humanos, garantistas y abolicionistas, frente a la violación de los de los presos, exacerbada por las medidas tomadas en las cárceles relacionadas con la «pandemia mundial», a base de privaciones, represión y más aislamiento, que no de verdadera prevención médico-sanitaria. Gonzalo Tejerina interviene al final, reivindicando la excarcelación de las personas presas con enfermedad mental y señalando la complicidad de los médicos. Hablamos finalmente con Vicent Almela de la prohibición que ha opuesto la autoridad carcelera catalana a su intento de entrar en Brians I a entrevistar a un preso, a pesar de la reciente sentencia del tribunal constitucional en el sentido de que tanto presos como periodistas tienen derecho a ello.

 

covid19 La cárcel mata Política criminal Radio: Tokata Y Fuga ¿Salud carcelaria?

Reproducimos el escrito dirigido a Instituciones Penitenciarias que nos hace llegar la mujer de un preso en Soto del Real en el que se recogen la falta de información y transparencia hacia los presos con el tema del virus covid-19 así como la falta de medidas reales para evitar el contagio y donde también se muestra el contraste con las medidas que se toman en la calle con el estado de excepción.

Me dirijo a ustedes, que son los responsables de salvaguardar la salud y la integridad de los internos de las prisiones españolas. Soy Marta, la mujer de un interno en el Centro Penitenciario Madrid V Soto Del Real y quería hacer un llamamiento urgente ante esta situación con respecto al Covid-19.

Desde que se ha decretado el estado de alarma, a los internos como bien saben, se les han quitado los vis a vis y desde el domingo día 15 de marzo, las comunicaciones por locutorio. Concretamente, ese día, ya nos confirmaba mi marido lo que había salido en la prensa, que se había aislado uno de los módulos, el 9 concretamente, para poder tener ese lugar para posibles cuarentenas o infectados por el Coronavirus. Esto ha supuesto que todos los que estaban allí los han repartido por los demás módulos exponiendo a todos a un posible contagio y masificación de personas. También nos confirmaba que la enfermería estaba desbordada por la gente que estaba yendo porque tenía síntomas del Coronavirus. Desde Instituciones Penitenciarias lo habéis negado y solo en esta última semana se ha dicho que había algún infectado en este centro. Era de esperar, ya que siempre tienen ustedes una  opacidad impresionante pues ahora aún más.

Ese mismo día 15, ante esta situación de un posible contagio más aún si cabe por estos movimientos internos, y por no tener ni mascarillas ni guantes ni nada allí dentro, decido llevar a mi marido este material de protección para que se lo pudieran dar en el paquete reglamentario que dejan pasar. Con las mismas me dijeron que si la Administracion lo veía necesario se lo darían ellos directamente. Pero vamos a ver, en serio creen ustedes que no es necesario que los internos se protejan los unos de los otros teniendo en cuenta que ellos no pueden guardar ni la distancia de seguridad tan siquiera entre ellos?. Que en el comedor están comiendo codo con codo y todos mezclados sin ningún tipo de control de los que tienen todos los síntomas? En serio?. Las personas encargadas de comedor TAMPOCO LLEVAN MASCARILLA Y GUANTES PARA REPARTIR LA COMIDA. POR SUPUESTO NO ME DEJARON PASAR NI LOS GUANTES NI MASCARILLAS QUE LE LLEVABA A MI MARIDO E HICE UNA RECLAMACIÓN POR ELLO.

A 31 de marzo, no se les ha facilitado NADA A NINGÚN PRESO, solamente más papel higiénico para limpiar. Que cuando mi marido llama por teléfono en las cabinas comunitarias que tienen no puede ni tan siquiera limpiar debidamente el teléfono para evitar el contagio. Que no pueden desinfectar debidamente sus celdas. NO LES DAN NADA PARA EVITAR EL CONTAGIO ENTRE ELLOS. Solo hace 3 días, después de la primera quincena del estado de alarma, han empezado a habilitar más espacios para comer y ahora sí se les obliga a ponerse las mascarillas. Entonces por qué no me dejaron meterlas aquel día y tuve que poner la reclamación?

Por otro lado, MUY IMPORTANTE, sólo hasta hace menos de una semana el trabajo en talleres (empresa Pinazo) se seguía haciendo, todos los días, sin protección y con vaivén de gente constante, sin ningún tipo de control adicional por el tema del Coronavirus. De hecho la representación de comisiones de los trabajadores de la penitenciaria ya lo denunciaron públicamente, ACAIP, si no recuerdo mal, porque no se puede tolerar estos movimientos de personal sin control. Inclusive hay algunos internos que quisieron dejar el trabajo por miedo al contagio, con lo que esto suponía para ellos en su expediente. Esto también hace que los propios internos tengan encontronazos entre ellos.

Así mismo, en la enfermería, ya se sabe que hay dos casos de Coronavirus y a los encargados (presos) de este servicio les han dicho los funcionarios que si lo divulgan tendrán represalias contra ellos. Ustedes esto lo ven normal? Desde Instituciones Penitenciarias por supuesto también lo desmintieron.

Hay gente enferma con síntomas que no están aislados ni tienen ningún tipo de seguimiento médico. El médico tardó casi 15 días en ir a verles y cuando les toman la temperatura con el puntero parece ser que todos tienen 35ºC? NO SE LES ESTÁN HACIENDO LAS PRUEBAS PARA COMPROBAR SI TIENEN EL VIRUS. Hay mucha gente que habría que hacérsela urgentemente.

Hay módulos en los que hay más gente de edad avanzada y con mala Salud, como en el que está mi marido que es el 12, el de máximo respeto de este centro. Pero tampoco tienen en cuenta esto a pesar de ser personas de alto riesgo, incuido mi marido que es diabético de tipo 1. Han llegado a este módulo personas del módulo 9 que han tenido que recolocar, sin antes tomar las precauciones adecuadas, sin saber que se pueda estar propagando el virus sin ningún tipo de control. Desde hace 4 días se ha aislado el módulo 12, el de mi marido, porque ya se sabe que hay varios contagiados, y no me refiero a dos o tres. Cinco ya están aislados en sus celdas, otros tantos entre Hospital y enfermería y aproximadamente una veintena con síntomas. Los funcionarios hicieron cambios de compañeros de celdas y el virus se ha propagado más aún si cabe entre ellos. Hablo de las celdas 233, 202, 217 y 101 del módulo 12. El virus también se sabe que se ha propagado por el módulo 11. Qué coincidencia que estos dos módulos tengan infectados, que son las personas que tenían contacto con la gente que trabajaba en talleres. Claramente se está demostrando que ha sido el foco de infección.

El estado de alarma es para todos los ciudadanos y las medidas de protección son para todos, incluidos los presos. Las medidas tenían que haberlas tomado a partir del día 15 de marzo, no el 1 de abril, ya que a lo mejor ahora no tiene solución y dentro de unos días saldrán en las noticias que están muriendo uno tras otro. Que han demostrado que no les importa la vida de estas personas. Mi marido es factor de máximo riesgo por su enfermedad y no han tenido en cuenta esto.

Y por último pero no menos importante, teniendo en cuenta que a los internos, por seguridad y salud en este estado de alarma, se les quitan todas las comuniaciones con sus seres queridos (menos la telefónica), unida a la desconfianza que se ha creado entre ellos, unida al clima de tensión y psicosis provocada por esta situación anómala, puedo asegurarles que hay ya rumores importantes de posibles motines, es decir, que hay que añadir que puede que las revueltas que se produzcan allí dentro pueden tener consecuencias gravísimas.

Si no lo saben, les puedo informar de que ayer día 5 de abril a la hora de la cena se produjo una protesta unánime de todos los internos del módulo 12, concretamente se quedaron en el patio sin cenar. Por varias razones, primero, por el desinterés que está habiendo hacia ellos, que no se les ha protegido en ningún momento. Segundo, porque aún no han activado las videollamadas para hablar con la familia, ya que saben que se han comprado teléfonos para hacerlas y aún no les han dado respuesta. Y tercero, porque han suspendido las Juntas de tratamiento que se reúne cada 3 meses. Es donde deciden ciertas cosas de cada preso, por ejemplo los permisos, hojas meritorias, etc. Y esto no puede suspenderse, ya que las reuniones entre el personal de prision puede hacerse perfectamente por teletrabajo, como se está haciendo en el 90% de los empleos ahora mismo. Esto no se puede parar!!! Los presos no pueden estar desatendidos. Ellos querían que el director de la prisión fuese a hablar con ellos y les explicase estas cuestiones. La respuesta de los funcionarios fue “el director los domingos no viene”.

Después de esta protesta, pacífica, pero firme y unánime por parte de los internos del módulo 12 (de máximo respeto) llegaron los funcionarios y les dijeron a los que estaban allí, que cuando acabase todo esto del Covid-19, iban a repartirles por los módulos más conflictivos y algunos incluso cambiarles a otra prision. Es que ahora no van a poder decir lo que piensan de una forma pacífica? Es que se les va a sancionar tomando represalias? Es intolerable este comportamiento por parte de los funcionarios. Ante esta desesperación se oye constantemente a los presos dar golpes en sus celdas a modo de protesta.

Es curioso que se diga tanto de los módulos conflictivos que parece que ellos iban a empezar revueltas en la cárcel por lo que se comentaba de la falta de droga. Que siempre que se habla de algo de prisiones parece que se drogan todos, cuando nada tiene que ver con la realidad. Pero al final las personas que mejor se comportan en la cárcel y que se han ganado estar en un módulo de respeto, son los que tienen que reivindicar la falta de atención y salvaguarda que están teniendo con ellos. Porque al final el no ver a sus seres queridos está haciendo mucha más mella que cualquier otra cosa que han comentado los medios de comunicación.

Es que no hay ninguna petición que se pueda hacer para que mi marido no esté ahí dentro mientras se pasa este estado de alarma? Aunque esté con arresto domiciliario. Es que el que esté allí es más peligroso que estar en  su casa con su familia.

Por favor, explíquenme lo expuesto y evidentemente espero que no se pongan a tomar represalias con la gente interna por decir o divulgar lo que realmente está ocurriendo allí. Por cierto, la juez de vigilancia penitenciaria correspondiente a este centro tiene una falta de motivación impresionante y sus respuestas son siempre las mismas a pesar de ser quejas de diversa índole.

Yo tengo muchísimo miedo por mi marido, ya en su momento, hace unos meses casi pierde la vida por una mala gestión del servicio médico de prision, por lo que mi confianza en ellos es prácticamente nula.

ASI QUE DESDE AQUÍ, COMO LA MUJER DE UN INTERNO QUE ADEMÁS ES FACTOR DE MÁXIMO RIESGO, QUIERO TRANSMITIR ESTA PÉSIMA SITUACIÓN  QUE ESTÁN  VIVIENDO. Y QUE NO SE PUEDE CONSENTIR QUE NO SE SALVAGUARDE LA SALUD E INTEGRIDAD DE LOS PRESOS POR PARTE DE LA ADMINISTRACIÓN.

TENGO MUCHÍSIMO MIEDO DE QUE A MI MARIDO LE PUEDA PASAR ALGO MUY GRAVE, MORIRSE, NADA MÁS Y NADA MENOS, POR NO HABER TOMADO LAS MEDIDAS NECESARIAS PARA EVITARLO POR PARTE DE INSTITUCIONES PENITENCIARIAS Y POR ENDE LA ADMINISTRACIÓN.

Parece que se les ha olvidado QUE ANTE TODO SON PERSONAS. Y A ESTE PASO VAN A MORIR COMO CHINCHES. TODA SU FAMILIA ESTÁ MUY PREOCUPADA POR SU SITUACIÓN DE SALUD Y SU INTEGRIDAD FÍSICA.

¿PARA CUÁNDO LAS VIDEOLLAMADAS?

QUE NO SE TOMEN REPRESALIAS POR LO QUE  ESTÁ PASANDO AHÍ DENTRO Y POR PROTESTAR POR NO ESTAR DEBIDAMENTE ATENDIDOS.

Muchísimas gracias y espero que me contesten

Un saludo

covid19 ¿Salud carcelaria?

Aunque, entrado ya el mes de marzo, todavía comunicaron un par de compañeros presos su disposición a hacer sus diez días de ayuno dentro de la huelga de hambre rotativa por la excarcelación de las personas presas gravemente enfermas, este  mes ya empezó con sólo dos compañeros dispuestos a seguir la cadena y uno de ellos se retiró muy poco antes de que le llegara el turno. Mientras se estaba discutiendo si reanudar los ayunos rotativos en abril o no, empezó la maniobra mundial de manipulación de masas llamada «crisis del coronavirus», que se está sufriendo ahora en las cárceles en medida aún más ofensiva y opresiva que en la calle. Sin olvidar las propuestas que se habían hecho, por ejemplo, de reanudar la lucha con una huelga de hambre colectiva, todxs a una, el primero de mayo, el compañero Toni Chavero envía, desde el primer grado de la cárcel de Estremera, una propuesta para encarar de forma colectiva, dando así continuidad a los intentos anteriores, la difícil situación que plantea el «estado de alarma» por el coronavirus, que en la cárcel es un verdadero estado de excepción, con aislamiento, privaciones y represión y ninguna media preventiva real. La necesidad de excarcelación de las personas presas enfermas y mayores de 70 años, lo mismo que el resto de las 14 reivindicaciones de la propuesta de lucha colectiva, es ahora más actual que nunca.

Cárcel de Estremera, 18 de marzo de 2020

(…) Ahora y tras leer lo que comunicó desde Oporto (Portugal) nuestro querido compañero Gabriel, así como comunicados de diferentes grupos anticarcelarios que nos ponen al tanto de lo sucedido en Portugal, en Italia y, al parecer, también en el territorio del Estado español, aunque no estoy seguro al cien por cien, ya que, en el momento de escribir esto, aún me falta información, lanzo una propuesta que va muy ajustada de tiempo (porque no hay tiempo, simplemente) y, además, se nos junta con la posible huelga de hambre del 1 de mayo. No sé si será viable.

Al parecer, el día 25 de marzo terminaría la “cuarentena” a la que nos han sometido los hierofantes de la SGIP y los políticos, que han sembrado el terror y el pánico a través de sus medios de desinformación entre la población alienada y sin pensamiento crítico, obedientes de un gobierno obtuso y totalitario que van de progresistas y son unos nazis de mierda. A nosotrxs lxs presxs nos han aislado más si cabe y parece ser que esta situación se va a mantener por más tiempo, es decir, el día 25 no terminará, por lo que creo necesario movilizarnos al respecto de este secuestro al cubo. La cárcel dentro de la cárcel (aislamiento) = cárcel2 + incomunicación por cuarentena = cárcel3.

Los que estamos secuestrados en aislamientos automatizados no podemos llevar a acabo otro tipo de acciones. Aunque nos gustaría, es físicamente difícil, por no decir imposible, y tampoco seré yo el que os invite a que aumentemos (más si cabe) los años de condena intentando realizar acciones radicales. Yo propongo, y pongo a debate, lo siguiente: si el día 25 de marzo no nos levantan esta cuarentena que conculca nuestros derechos fundamentales y humanos, podríamos realizar ayunos reivindicativos con denuncias a la SGIP y a la subdirectora de sanidad penitenciaria Carmen Martínez Aznar, así como al conjunto de instituciones nazionales.

Eso, como poco, porque yo estoy dispuesto a realizar huelga de hambre y todo lo que esté en mis manos, a pesar de las consecuencias que me traiga cualquier movida que pueda preparar, ya que la situación de este estado de excepción que nos han impuesto no es más que terrorismo de Estado.

En los escritos a la tal Carmen Martínez Aznar le propondré otras medidas de “control” sanitario, a fin de poder ver a nuestros seres queridos, como tomarles la temperatura o lo que hostias se nos ocurra, el fin es conseguir romper esta represión en la que nos han confinado dentro y fuera.

En definitiva, yo, si no se levanta el 25 de marzo esta cuarentena, inicio ayunos el 26, 28 y 30 de marzo, el 1, 3, 6, 8 y 10 de abril, esos ocho días, salteados en principio, con escritos a lxs susodichxs. Siento mucho que no haya tiempo suficiente, si os llega tarde la propuesta y la queréis secundar en la forma que prefiréis hacerlo, yo me uniré a lo que sea, la cuestión es no cruzarnos de brazos y, a ser posible, actuar unidxs, intentando desarrollar y mejorar la coordinación que hemos conseguido hasta ahora.

Lo que no tiene sentido es que se nos prohíba comunicar con las familias y estén entrando y saliendo lxs carcelerxs y todo el personal carcelario que aquí “labora”. ¿Acaso ellxs no nos pueden contagiar también? ¿O es que están bendecidos por el espíritu Santa Claus? ¿Qué hostias pasa aquí?

¡Ánimo, fuerzas, solidaridad, gratitud, amor fraternal y rabia anticarcelaria! ¡Salud a todxs, dentro y fuera! ¡Que no cese la lucha por una sociedad sin jaulas!

Toni

Propuesta De Lucha Colectiva Para Ser Difundida Y Debatida Dentro Y Fuera (Renovada)

Noticias Sobre La Huelga De Hambre Rotativa De 2019/2020

¡No Olvidéis A Lxs Presxs En Lucha! [Lista Actualizada, 13-III-2020]

Más información en:

https://suportpresxslleida.noblogs.org/

https://desdedentro.noblogs.org/

https://henas.noblogs.org/

https://lacorda.noblogs.org/

https://colectivopronoiamurcia.noblogs.org/

https://jaensinbarrotes.noblogs.org/

https://elcarropropresxs.blogspot.com/

http://www.salhaketa-nafarroa.com/

covid19 Huelga de Hambre Mayo 2020 Huelga de Hambre Rotativa 2019-2020 Sociedad-cárcel ¿Salud carcelaria?

Desde el grupo Pronoia de Murcia, informan de la huelga de hambre que ha iniciado Juan David Garcia Concha para sumarse a las protestas que está habiendo en relación a las medidas tomadas para, supuestamente, prevenir el virus dentro de las cárceles. También adjuntan un audio con su propio testimonio en relación a su situación actual, ya que ha sido trasladado recientemente a la cárcel de Málaga II. La fotografía de arriba corresponde a una acción fugaz que se hizo en Barcelona hace unos dias. Se colgó una pancarta y se hizo algo de ruido delante de la cárcel de Wad-Ras, en apoyo a las presas que estaban en huelga de hambre para protestar por las medidas del coronavirus

El compañero Juan David García Concha ha iniciado hoy, lunes 23 de marzo, una huelga de hambre para reivindicar lo absurdo de las medidas implementadas por Instituciones Penitenciarias frente al protocolo adoptado por el riesgo del virus, visibilizar las contradicciones (todo el tema de que lxs carcelerxs no están teniendo respeto por lxs presxs y no utilizan medios preventivos de contagio) y luchar porque cese la incomunicación con las familias y con las amistades.

Además, se suma en apoyo a todas las protestas y demás huelgas de hambre que se están realizando en diferentes cárceles del estado español.

Adjuntamos un audio con su propio testimonio de lo que está viviendo tras su reciente traslado al C.P. Malaga II.

Picar aquí para escuchar el audio

Para escribir al compañero:

Juan David García Concha

C.P. Malaga II

Carretera Archidona-Villanova del Trabuco, km. 6

29300 Archidona (Malaga)

Mas información en:

https://suportpresxslleida.noblogs.org/

https://desdedentro.noblogs.org/

https://henas.noblogs.org/

https://lacorda.noblogs.org/

https://colectivopronoiamurcia.noblogs.org/

https://jaensinbarrotes.noblogs.org

https://elcarropropresxs.blogspot.com

www.salhaketa-nafarroa.com

Actividad en la calle covid19 Presxs en lucha ¿Salud carcelaria?

Hablamos de la invivible situación que padecen las personas presas en las cárceles del Estado español, de algunas reacciones de rebeldía frente a ella y de las sugerencias hechas a la autoridad tanto por lxs mismxs directamente afectadxs como por una serie de asociaciones de defensa de los derechos humanos y abolicionistas, grupos anticarcelarios, de apoyo a presxs o de familiares, etc. para que aborden efectivamente la «crisis sanitaria» en lugar de hacérsela pagar a lxs presxs y a sus familiares, empeorando, si cabe, las condiciones de vida ahí dentro. Emitimos varias grabaciones: de la compañera de un preso, de uno que está dentro y de otra persona que lo ha estado muchos años, denunciando los tratos crueles, inhumanos y degradantes que no pueden evitar inferir las instituciones punitivas y menos en el momento actual, cuando pintan bastos y se impone un paroxismo de mala fe también en la calle.

covid19 Presxs en lucha Radio: Tokata Y Fuga Sociedad-cárcel ¿Salud carcelaria?

Ochenta y ocho personas presas en el módulo II de la cárcel de Villena (Alicante) se han dirigido al juez de vigilancia penitenciaria oficialmente a cargo de esa cárcel, aunque dudamos que ejerza realmente su función legal de «tutela  judicial efectiva» de los derechos de la gente presa, y al Defensor de Nadie, a quien llamamos así, igual que hacen siempre lxs presxs en lucha, porque tampoco creemos que defienda los derechos de ninguna persona como tiene encomendado por unas leyes tan hipócritas como la orgánica penitenciaria, que, aunque lo que regula y justifica en realidad es la muerte en vida, lo hace hablando constantemente de esos derechos y garantías cuya violación rutinaria tanto contribuye a disfrazar y mantener impune. Ochenta y ocho personas, pues, han entregado sendos escritos firmados por todas ellas, donde constan con ligeras variaciones las peticiones  que hace unos días presentaran una serie de organizaciones de defensa de los derechos humanos, grupos anticarcelarios y de apoyo a presxs, asociaciones de familiares, etc. a las que se han ido sumando algunas otras, hasta 56 ahora mismo, a través de un formulario en internet. No repetiremos esas peticiones, publicadas aquí recientemente y que se pueden encontrar picando en estas palabras coloreadas, y sintetizan un conjunto de medidas que pudieran afrontar realmente la epidemia de coronavirus en las cárceles respetando la dignidad y las necesidades básicas de las personas presas un poco más que las arbitrarias disposiciones de aislamiento de la calle y privación extrema de sus «derechos», ya sobradamente mermados, que se les está haciendo sufrir hace ya varios días. Reproducimos a continuación un texto publicado por lxs compis del Grup Anticarcerari del Camp de Tarragona La Corda, junto con un informe –que podéis encontrar siguiendo el enlace en rojo– sobre la situación creada en las cárceles por las supuestas medidas contra el coronavirus que no son más que una vuelta de tuerca más en la privación sistemática que se hace sufrir a las personas presas de todo lo que caracteriza a los seres humanos, algo muy parecido, aunque corregido y aumentado a lo que está pasando en la calle.

EL LUGAR DE LOS OLVIDADOS

La cárcel siempre ha sido el lugar de lxs olvidadxs. Un espacio donde la agresión y la tortura están a la orden del día. Lxs presxs no son solo agredidxs física y psicológicamente por carcelerxs a diario (y por la sociedad que legitima dichas agresiones), sino que la propia estructura de una cárcel y la precariedad de sus servicios hacen de este lugar un agujero. Desde el hacinamiento diario de presxs en módulos, hasta la mediocridad de sus servicios sanitarios (285 médicxs + 6 psiquiatras para 58.369 presxs en el estado español), dietas (se pasa mucha hambre y los alimentos son de mala calidad y sin contenido nutricional), higiene, reposo, intimidad… Y la lista es infinita si hablamos de falta de derechos básicos fundamentales. En cambio, la opacidad de sus muros y una sociedad cómplice hacen que tal vulnerabilidad y crisis humanitaria caigan permanentemente en el olvido.

Nada de esto es nuevo; en cambio, desde hace algunas semanas ha aparecido un ente nuevo, un “virus extremadamente contagioso” que pone en jaque a una sociedad entera; es capaz de detener parcialmente la maquinaria capitalista de varios estados. Aquí fuera nos imponen un confinamiento, una higiene y un largo etcétera de normas (en definitiva, una responsabilidad individual y colectiva) que acabarán por paliar las consecuencias. En cambio, la cárcel es carne de cañón. Se ha convertido en uno de los lugares más vulnerables frente a esta pandemia. Y es que un mismo virus (covid-19) no afecta por igual fuera que en un lugar donde la propia naturaleza y su estructura se caen a pedazos desde que se creó. No hay servicios sanitarios suficientes para cubrir las necesidades de posibles pacientes dentro de las prisiones; no hay espacios acondicionados para un aislamiento digno; no hay información ni medios de higiene para evitar posibles contagios; es impensable el confinamiento (¡aquí fuera es obligatorio!)….

No nos engañan, no es el virus quien amenaza; el virus solo pone de manifiesto, y con más fuerza, que la propia cárcel mata. La lucha no es solo hoy, la lucha es y será siempre.

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Abajo va una traducción al castellano de un artículo de Vicent Almela publicado ayer en la página web de La Directa en el que hay una síntesis de lo sucedido últimamente en algunas de las cárceles del Estado español, sometidas todas ellas a una situación de excepción, basada en el aislamiento del exterior y el despotismo de los carceleros, que no contribuye en nada a remediar la catástrofe médico-sanitaria que reina en ellas, sino que podría agravarla notablemente, dada la insalubridad del medio carcelario, la vulnerabilidad de las personas presas ante las infecciones y el hecho de que los boqueras entran y salen libremente sin que se controle lo más mínimo la propagación que ellos mismos pueden hacer del virus supuesto causante del «estado de alarma» impuesto, dentro y fuera, por la autoridad. La información del artículo se centra, sobre todo, en las cárceles catalanas y, especialmente, en la de mujeres de Wad-ras, donde, que sepamos, todavía continúan la lucha y las medidas represivas contra quienes participan en ella. Como se relata en varios mensajes que está circulando en redes sociales:

17-III-2020

Hemos comenzado una huelga de hambre porque los funcionarios viene sin mascarillas, ni guantes. Ha venido la Subdirectora y le hemos dicho que una de nuestras compañeras ha cogido el virus, nosotras hemos estado conviviendo con ella en la misma celda. Le hemos pedido que se nos haga la prueba ya que tenemos síntomas. No se nos ha hecho caso. Con este acto de negarnos a comer al menos hemos conseguido que los funcionarios se pongan guantes y mascarillas y su trato hacia nosotras ahora es más correcto. Hay internas que están aisladas, tanto por tener síntomas del virus, como por ser ingresos. Están en aislamiento y no sabemos nada de ellas. Nos han quitado todas las comunicaciones sin facilitarnos ninguna información, ni siquiera para poder recibir dinero del exterior. Al final nos han facilitado un número de cuenta para poder hacer ingresos. Se han aplazado las juntas de tratamiento, con lo cual no podemos acceder a permisos ni progresiones de grado. El equipo y régimen dicen que todo depende de la dirección general e instituciones penitenciarias. Los juicios se aplazan sin tener en cuenta de que de ello depende nuestra libertad. Hemos expresado que nos hacen sentir como ratas, que solo somos un número para ellos, a lo que han hecho caso omiso. Pero con nuestra actitud de hoy, hemos conseguido que sepan que no tenemos miedo.

18-III-2020

Seguimos en huelga de hambre por las siguientes reclamaciones:

1.- Que continúen trabajando profesionales del centro para no retrasar las fechas de revisiones de grados y de permisos ya que es un derecho necesario.

2.- Solicitamos videoconferencia ya que nos han denegado otro medio de comunicación, con una duración de 15 a 20 minutos con compromiso nuestro de aportar para poder gestionar las videollamadas.

3.- Desde el departamento de madres, que se tenga en cuenta sus revisiones de grado y permisos para que puedan estar con sus hijxs.

4.- Las que están a espera de juicio, que se les busquen medidas alternativas fuera de prisión para protegerlas de no ser contagiadas.

5.- Que se les ofrezca a las internas extranjeras la opción de poder regresar a sus países.

6.- Las internas de segundo grado que están con permisos aprobados que tengan la posibilidad de volver a sus domicilios con medidas telemáticas y también se les proponga a las internas que estén a la espera de sentencias o recursos.

7.- Necesitamos más alternativas para poder pasar el tiempo más livianamente por todas las limitaciones del coronavirus dentro del centro: clases por escuelas online, poder utilizar el gimnasio, más tiempo de patio y que igual que se nos facilitaron más llamadas que también se nos facilite dinero para poder hacerlas.

8.- Solicitamos indultos, medidas telemátcias y condicionales para las internas que tienen más de la mitad de la condena cumplida o que tienen patologías graves.

9.- Que se nos trate con dignidad y no como un número de expediente.

Asimismo, jsutificamos a todas las compañeras que no pueden participar en la huelga por motivos de salud. Sentimos el terror, estamos apenadas, preocupadas y tristes, porque deseamos poder pasar la epidemia con nuestros familiares, ya que no sabemos cuánto durará.

19-III-2020

Ayer día 18 de marzo por la noche las presas continuaban reivindicando sus demandas cuando llegó el jefe el módulo que, al ver la situación, llamó a los otros carceleros. Se llevaron a tres de las presas a aislamiento. A una de ellas, la sacaron a rastras por el pasillo unos dos metros y ahora continúa aislada y atada. Las otras dos fueron trasladadas anoche en conducción fantasma (un traslado no autorizado) hasta Brians, donde se encuentran en este momento. Desde allí siguen exigiendo lo mismo: tanto medidas sanitarias, ya que continúa habiendo contagios, como medidas alternativas para sus condenas, ya sean indultos, telemáticas o arrestos domiciliarios. Nos piden todo nuestro apoyo aunque sea individualmente. Sea como sea, rebelémonos contra el confinamiento, hagámosles sentir que no están solas.

 LAS MEDIDAS PARA PREVENIR EL CORONAVIRUS DESENCADENAN HUELGAS DE HAMBRE Y PROTESTAS ENTRE LA POBLACIÓN RECLUSA

El lunes pasado algunas mujeres presas del centro penitenciario barcelonés de Wad-ras decidieron empezar una huelga de hambre para denunciar la falta de medidas preventivas por parte del funcionariado del centro y pedir una serie de medidas concretas en las instituciones penitenciarias. En otras prisiones del Estado está habiendo plantes, sentadas colectivas y otras acciones de protesta espontáneas que las personas presas utilizan como estrategia para denunciar las restricciones en las comunicaciones o la falta de prevención e información que están recibiendo dentro de los centros.

Hace casi una semana comenzaba en el módulo 1 del centro penitenciario de Brians I un intento de huelga de hambre por parte de un grupo de presos, para protestar por la cancelación de las comunicaciones vis a vis y la falta de medidas preventivas para parte del funcionariado de la cárcel para no contagiar la Covidien-19 a las personas presas. Durante la acción del domingo, donde algunos presos se negaron a comer, los carceleros del módulo 1 decidieron sancionar a cuatro de ellos, haciendo uso del artículo 72 del Reglamento Penitenciario, y encerrarlos en una celda de aislamiento «por atentar contra la seguridad del establecimiento penitenciario». Según el grupo de apoyo a Amadeu Casellas, que se encuentra preso desde hace casi dos años, en espera de juicio, en este mismo módulo de Brians y que también participó en la protesta colectiva, esos cuatro presos aún continúan en aislamiento hoy. Después de las represalias, el resto de presos desistieron y  no continuaron con la huelga por miedo a posibles represalias.

Precisamente en el centro penitenciario contiguo, en Brians 2, y concretamente en el módulo 13, hubo el primer caso de coronavirus detectado en un interno de una cárcel catalana, que, según informaba el Departamento de Justicia, cuando se enteraron, fue inmediatamente trasladado al hospital de Terrassa. El resto de reclusos del módulo –105 personas– siguen confinadas y no tienen permitida la salida del recinto para realizar ninguna clase de actividad más allá de salir de sus celdas.

En la cárcel de mujeres de Wad-ras, en el barrio de Poble Nou Barcelona, ​​el pasado fin de semana también se detectó el primer caso de coronavirus en una interna a la que le quedaban pocos días para salir en libertad. En este caso, la dirección del centro la dejó salir finalmente, pero el resto de mujeres con las que tenía trato diario aún están a la espera de pruebas más de una semana después. Otro caso positivo por coronavirus de una interna de Wad-ras que se ha hecho público esta misma mañana por parte de las instituciones penitenciarias catalanas ha sido el de Rosa Perala, cusada por el crimen de la Guardia Urbana. Este hecho ha propiciado que el departamento de justicia haya decidido confinar a partir de hoy a todas las mujeres presas en régimen ordinario del centro, ya que Peral comparte espacio con ellas desde hace tres años en situación de prisión preventiva. También se han suspendido todos los ingresos y, de ahora en adelante, todas las mujeres que ingresen en esa prisión serán derivadas a Brians I.

La situación en Wad-ras se complica aún más si se tiene en cuenta el hecho de que algunas internas decidieron plantarse y empezar una huelga de hambre el pasado lunes como protesta ante la cancelación de los vis a vis y las comunicaciones por locutorio con las familias y amistades, la falta de tests médicos a las mujeres presas que habían sido con la persona infectada y la falta de medidas preventivas por parte de los funcionarios del centro. Según el comunicado escrito por el grupo de internas en huelga de hambre, y difundido por el grupo de apoyo Solidaritat Rebel, mediante esta acción de protesta quieren visibilizar una tabla con nueve reivindicaciones concretas dirigidas a las instituciones penitenciarias. Estas reivindicaciones incluyen medidas prácticas durante este periodo de emergencia por la Covidien-19.

Algunas de estas reivindicaciones coinciden con las medidas solicitadas al Ministerio del Interior español –que bajo el estado de alarma también controla las cárceles catalanas– por más de cincuenta organizaciones en defensa de los derechos humanos, familias de personas presas y grupos de apoyo el pasado lunes. De momento, ayer miércoles el ministerio dirigido por Grande-Marlaska dictaba una orden por la que instaba a las juntas de tratamiento facilitar que las personas que se encuentran en régimen de semilibertad –en tercer grado o que ya disfrutan de la aplicación de la artículo 100.2 del Reglamento Penitenciario para trabajar fuera de los centros penitenciarios– puedan quedarse en sus casas sin necesidad de volver a las cárceles para dormir, mediante el uso de brazaletes telemáticos o el control telefónico. En caso de materializarse, esta medida podría afectar a unas 8.000 personas de las cerca de 60.000 que hay privadas de libertad en la actualidad.

Aunque desde las entidades en defensa de los derechos humanos, las familias y los grupos de apoyo a personas presas ven «positiva» esta medida, todas coinciden en que «es insuficiente», y que al menos se debería habilitar un espacio para videoconferencias en todos los módulos –como ya se empezó a hacer esta semana en las cárceles italianas–, ofrecer llamadas de teléfono gratuitas a todos los reclusos, incluso aquellos que no disponen de recursos económicos, dotar de material preventivo a todas las personas presas y al personal penitenciario, hospitalizar a las personas contagiadas en un entorno médico adecuado y excarcelar de forma inmediata a todas las personas con enfermedades graves y con más de 70 años.

Las Protestas se extienden a las cárceles de todo el Estado español

A pesar de la falta de información sobre lo que ocurre en los centros penitenciarios estos días –en que los vis a vis y las comunicaciones por locutorio han sido canceladas de forma progresiva desde que estalló la emergencia vírica–, varios abogados, familiares y grupos de apoyo que aún mantienen contacto telefónico con las personas privadas de libertad han estado informando sobre las diferentes acciones de protesta que se están sucediendo en los diferentes centros para denunciar las restricciones en las comunicaciones o la falta de prevención e información que están recibiendo las personas presas. Según relatan desde la asociación de Familias de Presos en Cataluña, que mantiene contacto diario con los presos por vía telefónica, «la situación dentro está muy tensa».

Según fuentes de los carceleros del centro penitenciario de Picassent (Valencia), el pasado martes hubo un intento de motín, cuando los presos del módulo 2 iniciaron una protesta para denunciar que no disponen de la asistencia médica adecuada dentro del centro ni del material preventivo para evitar el contagio de la Covidien-19, afirmando también que «se sienten completamente abandonados por las autoridades penitenciarias». La protesta fue reprimida por los boqueras que aplicaron aislamiento preventivo a seis de los internos que participaron en la acción protesta. Situaciones similares se están sucediendo en otros centros penitenciarios como Quatre Camins (Barcelona), Mas de Enric (Tarragona), Fontcalent (Alicante), Sangonera (Murcia), o Zuera (Zaragoza). Según alertan desde la asociación de familias, «a muchos de los presos aún no se les ha comunicado que les han cortado todas las comunicaciones –también por locutorio–, cuando se enteren ya veremos qué pasa. Es necesario que las instituciones tomen medidas urgentes para mejorar la comunicación con las que estamos fuera, y que sepamos tanto ellos como nosotros lo que está pasando.»

Aunque todavía no hay datos oficiales sobre más casos positivos de Covidien-19 en las cárceles –aparte de los casos detectados la semana pasada en la prisión de Zaballa y Brians 2, y hoy en la prisión de mujeres de Wad-ras–, según los últimos datos publicados por un sindicato de carceleros, en las cárceles del Estado español se han contabilizado hasta el momento 164 internos y medio centenar de funcionarios aislados, a la espera de conocer si son casos positivos de contagio. En Cataluña hasta el momento hay 117 personas presas aisladas de forma preventiva, y también quedan confinados todos los presos del módulo 13 de Brians 2, y desde esta mañana todas las mujeres presas en el centro penitenciario de mujeres de Barcelona.

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