El pasado 21 de octubre, las personas presas en la cárcel racista de Aluche de Madrid empezaron una huelga de hambre, que duró dos días, en protesta por el maltrato que sufren dentro del centro. Hoy son los presos del CIE de Zona franca. Al menos 68 personas de origen argelino empezaron una huelga de hambre este domingo por la mañana para reclamar su puesta en libertad. El director del centro estaría intentando negociar, puesto que se encuentran en un espacio comunitario y se niegan a subir a las celdas.
Esta mañana de lunes, los colectivos por el cierre de los centros, como Cerremos los CIE, han confirmado que los que mantienen la huelga son una cuarentena y han pasado la noche al patio. Finalmente, una comisión de Cerremos los CIE ha podido hablar con los huelguistas y han confirmado que son originarios de Argelia y, muchos de ellos, piden asilo al Estado español, donde han llegado mediante una patera cruzando el Mediterráneo. Una de las activistas que han entrado al recinto ha podido saber que actualmente hay 182 internos, 134 de los cuales son de nacionalidad argelina. «Solamente tienen una reivindicación, quieren su libertad», explicaba el abogado Andrés García Berrio a la salida del CIE. Desde la plataforma contra los CIE, se ha pedido un posicionamiento político por parte de los partidos políticos, además de reclamar el cierre definitivo este tipo de centros. En la Zona franca se han acercado diferentes representantes políticos de la CUP, Cataluña Sí que se Puede, Esquerra Republicana, En común Podemos y Juntos por el Sí, que han intentado acceder en el centro para solicitar una reunión con el director, quien no les ha atendido.
La última huelga de hambre en el centro de Zona franca se produjo a finales de 2013, a raíz de la muerte del ciudadano armenio Aramis Manukyan, e implicó a una cuarentena de personas. Más tarde, el abril de 2014, 97 internxs en ell CIE de Zapadores, en Valencia, también iniciaron una para denunciar un vuelo de deportación.
Antes del verano, se abrió una grieta de esperanza para los colectivos que, desde hace años, luchan por el cierre de los centros de internamiento, cuando el Ayuntamiento de Barcelona ordenó el cese de actividad del CIE al Ministerio del Interior, argumentando que no contaba con la licencia de actividad correspondiente y que esta no cumplía la normativa de seguridad requerida. El centro había sido cerrado durante unos meses por reformas y el Consistorio pretendía que no se volviera a abrir. Finalmente, sin embargo, el Gobierno español lo volvió a poner en funcionamiento.
Según los datos del mismo ministerio del Interior español, el CIE de la Zona franca de Barcelona ha tenido presas a 738 personas a lo largo del 2015, todas hombres. En reiteradas ocasiones, tanto internos, como entidades en defensa de los derechos humanos han denunciado que la existencia de estos centros suponen constantes violaciones de derechos humanos.
La plataforma de entidades por el cierre de los CIE ha convocado una concentración a las puertas del centro de la Zona franca esta tarde a las 19 h para mostrar la solidaridad con la cuarentena de personas que todavía continúan con la huelga de hambre.
Fuente: Directa
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