Buoncammino, la cárcel de Cagliari, está de nuevo en fermentación después de la protesta de hace algunas semanas que dio origen a la redacción de una carta firmada por numerosos presos (ver al final) y dio vida a una huelga de comida de la prisión.
La protesta partió del área izquierda donde los presos decidieron barricarse dentro de las celdas y quemar los muebles. También han aparecido pancartas contra la sobrepoblación y las condiciones precarias de la cárcel, pero sobre todo contra las vejaciones que están obligados a sufrir además de la privación de la libertad. Entre estas, quien estuviera en el lugar habría podido leer solo el final de una pancarta que rezaba “…y uno termina en aislamiento”, un tratamiento probablemente reservado a quien se lamenta de las condiciones en que se vive en Buoncammino.
Como única respuesta, los guardias del penitenciario les apagaron las luces. Una veintena de solidarios que se acercaron a los muros de la cárcel para llevar un poco de apoyo y entender cuáles eran las reivindicaciones, recogieron los testimonios. A estos lxs pararon agentes de la DIGOS para hacerles un control general.
Documento colectivo de 134 presos de la cárcel Buoncammino Cagliari
A la dirección de la cárcel Buoncammino.
Para conocimiento de: el Ministro de Justicia, la prensa, oficial y no oficial.
Buoncammino, 17 de junio de 2013
Cansados de que se siga sin escucharnos, los que escribimos esto, todos presos en la cárcel de “Buoncammino” de Cagliari, en relación a la primera huelga de la comida de hace 20 días, anunciamos que vamos ha hacer una huelga de patio, rechazando ir a los lugares destinados al “paseo” los días 17 y 18 de este mes, esperando que estos dos días le sean útiles a la dirección, para que pueda remediar de una vez por todas el dramático problema que suponen los “paseos”. Disfrutamos de solo unas 2 horas y media de patio al día, por la pésima organización en la que se cumplen los horarios de apertura de las celdas, en lugares angostos, aplastados unos contra otros como si fuéramos ganado (sin contar que muchos de los presos no salen al patio por este problema, y ¡no queremos ni imaginar si tuvieran que salir todos!) y que ¡una situación tal se traduce en una tortura cotidiana! El aumento del calor y los ingresos continuos de gente que entra nueva empeoran estas condiciones, mientras que cada vez son menos las personas que salen (ni siquiera los presos que disfrutan de permisos salen regularmente, por voluntad del área educativa, esta es la única cárcel donde la gente en tercer grado sale cada 4 meses, ¡y no cada 45 días como en el resto de las cárceles italianas!)
Pedimos que finalmente se nos conceda el horario estivo, que nos permite volver a entrar en las celdas hacia las 16:30 y 17:00, dado que no existe ninguna otra apertura de celdas a parte de esas 2 horas y media, como no ocurre en cualquier otra cárcel. Además, queremos hacer presente que existe un gran patio que no se ha utilizado nunca, a pesar de nuestras peticiones para usarlo. Bastaría abrirlo para aligerar los demás espacios angostos y hacer un poco tolerable la sobrepoblación de los patios (no por casualidad llamados “cuartitos”). Señalamos indispensable una modificación para hacer mejor los turnos de los cuartitos y del campo y una modalidad más eficaz de apertura de las celdas. Con esta huelga también nos unimos a las protestas y huelgas que se están llevando a cabo estos días en otras cárceles, en la que se está creando una movilización también en el exterior por la amnistía generalizada, contra la tortura, el aislamiento, la muerte, las cadenas perpetuas.
PD: Debido al aislamiento entre los dos brazos de la cárcel, no llegaron a tiempo las firmas del otro ala. En los próximos días las enviaremos también.
Siguen 134 firmas.
Sé el primero en comentar