Como en anteriores veranos la prisión de Alhaurín de la Torre no tiene agua ni para consumo humano, ni para la higiene personal, ni para la limpieza de las instalaciones.
La prisión se abastece de un pozo que no tiene capacidad suficiente en circunstancias normales, ahora en verano la cosa se agrava, ya que debido a las altas temperaturas el consumo se incrementa.
A pesar de estas circunstancias y de reiteradas denuncias la prisión de Alhaurín sigue estando al margen de la red pública de distribución de aguas.
una vez más, aparte de la privación de libertad, les quitan sus derechos fundamentales. vaya verguenza.