NO AL SILENCIO, SOLIDARIDAD CON PAKA DE LUCÍA, TRASLADADA A BRIEVA (ÁVILA) POR DENUNCIAR LAS TORTURAS SUFRIDAS EN LA MACROCÁRCEL DE ZUERA
Entró voluntariamente para cumplir una condena de 6 meses en la macrocárcel de Zuera, pensando que lo mejor era acabar cuanto antes con esa pesadilla. A pesar de lo que intentan hacer pensar está claro que en estos circuitos las buenas conductas no se valoran.
Pasados algunos días empezó a recibir golpes y torturas psicológicas:
“ayer me pegaron dos ostias una en cada oído, y cuando me subían a la celda de aislamiento me dijo que yo he abandonado a mis hijos ¿que? Zas, va y me coje del cuello hasta que casi desfallezco, uno dando y siete mirando. Al llegar a la celda de aislamiento uno me da dos puñetazos, mientras el otro me retuerce el brazo hasta casi partirme”
Nuestra compañera PaKa, Lucía Gutiérrez, denunció los hechos, con la esperanza de que llegaran a algún sitio. Ese mismo día tuvo la suerte de recibir la visita de una abogada del servicio de orientación penitenciaria, quien vio su estado. Ya es bastante la tortura de estar entre rejas, para que lo hagan más difícil todavía, resulta crispante que estas actitudes vejatorias y humilladoras sigan existiendo. Parece necesario recordar que las personas presas también tienen derechos.
Los funcionarios, aparte de torturarla, le pusieron tres partes graves de mal comportamiento, por lo que pasa a estar presa en primer grado. En la macrocárcel de Zuera, además de no existir un módulo de mujeres, no existe el primer grado, o en casos muy determinados, por lo que PaKa ha sido trasladada a la cárcel de Brieva, Ávila. De esta manera han conseguido tenerla más aislada aplicando su habitual política de dispersión, por lo que 900 serán los kilómetros que tendrán que realizar sus familiares y amistades para ir a visitarla. El traslado se realizó tan rápido que no le dejaron ni despedirse de sus hijos.
Creemos que es injusto el traslado de esta presa, más cuando entró por propia voluntad para acabar cuanto antes y poner fin a este duro proceso. La cárcel y todo lo que la rodea, son los encargados de hacérselo pasar mal a ella y a todas esas personas que la quieren, que la tienen lejos y entre rejas. Creemos que se hubiera podido actuar de otra manera y haber estudiado más detenidamente la opción de que PaKa cumpliera su primer grado en la macrocárcel de Zuera.
Mantenemos comunicación con ella, está muy contenta del apoyo que está recibiendo, nos alegra que sea así. Tanto por su estado como por la solidaridad de las personas que se preocupan. Es importante que las presas no se sientan solas. Ya es bastante cruel la realidad de estar en una cárcel, rodeada y vigilada por esas personas que se hacen llamar funcionarios de prisiones.
Una vez más el sistema penitenciario nos muestra que el único objetivo que se cumple en la cárcel es torturar y no reinsertar. Nuestro silencio nos hace cómplices. Es por esto que hacemos un llamamiento a la solidaridad con PaKa, y con cualquier persona presa. Porque nosotras, las que estamos fuera, por desgracia somos un apoyo absolutamente necesario para ellas.
Esperamos que pronto puedas estar cantando con nosotras.
Puedes escribirle a:
Lucía Gutiérrez Galán. Módulo verde
C.P. Ávila. Ctra. de Vicolozano-Brieva, s/n.
05194 Brieva (Ávila)
Sé el primero en comentar