APDHA Alerta Del Preocupante Nivel De Torturas En La Cárcel De Córdoba

De acuerdo con lo publicado en www.diariocordoba.com el pasado 10 de diciembre: «La Asociación Pro Derechos Humanos de Andalucía en Córdoba (APDHA) denuncia «la preocupante» situación del centro penitenciario de Córdoba, que, según el último informe de la Coordinadora para la prevención y la denuncia de la tortura, es uno de los que más denuncias de los internos por malos tratos registró el año pasado. De hecho, el comité para estos asuntos del Consejo de Europa «decidió seleccionar la prisión cordobesa como uno de los establecimientos que inspeccionar». APDHA hizo ayer esta y otras denuncias, recogidas en su informe anual, aprovechando la conmemoración del Día de los Derechos Humanos, que se celebra hoy en todo el mundo. Sobre el centro penitenciario, Valentín Aguilar, miembro de APDH, lamentó además que las líneas de autobuses de Aucorsa sigan sin llegar al centro penitenciario, con el consiguiente extravío para los familiares de la población reclusa. La asociación reclama que la línea que llega hasta la barriada del Angel aumente una parada para solventar el problema de aislamiento de la prisión. APDHA trasladó esta demanda al Defensor del Pueblo Andaluz, que está estudiando el caso.

Otro colectivo que la asociación ha visto empeorar este año es el de los inmigrantes, que constituyen un pequeño porcentaje en la población cordobesa (apenas el 3%) y que por primera vez, según el Instituto Nacional de Estadística, decrece. «Los emigrantes españoles ya superan a los inmigrantes extranjeros», advierte Carlos García. «La situación económica-laboral ha tenido una especial incidencia en la población extranjera, que sufre el desempleo y además no tiene una estructura familiar en Córdoba para ayudarle», indica. Asimismo, APDHA explica que la pérdida de empleo puede conllevar la pérdida de papeles y del permiso de residencia. En la asociación también se muestran preocupados por que los mensajes xenófobos crezcan con la crisis y «se termine pensando que los inmigrantes son parte del problema y no una víctima». De todos los inmigrantes, una vez más, los rumanos son los europeos con menos derechos, tras haberse prorrogado la moratoria por la que los que vengan ahora a España pueden quedarse a vivir, pero no trabajar hasta finales del 2012. La asociación cree que esta medida estigmatizará «aún más» a un colectivo muy maltratado ya.

En último lugar, María José Serrano denunció la fragilidad del último eslabón de la prostitución y alertó del peligro de que empresarios de zonas con problemas de este cariz pidan la prohibición de estas prácticas. «Tememos que esos mensajes terminen calando en el Ayuntamiento y que terminen prohibiendo la prostitución, que será aún más estigmatizada».»

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