¡¡Anarquía Compañerxs!! (Carta De Baldomero Lara)

Con el expreso deseo de que este nuevo año 2012 traiga abundante agua fresca a las cabezas adormiladas que con su pasiva actitud facilitan la tortura, la explotación, la muerte humana y de la tierra.

Desde la línea caliente del frente anticarcelario creo que hemos emprendido una vía, exigir un observatorio ciudadano independiente con total acceso a las personas, departamentos y expedientes. Un abanico de torturas se abre cada día en estas granjas de humanxs. Su finalidad teórica de reeducación, rehabilitación, medio contra el delito… es una gran farsa. Sus medios para esa “finalidad” son sádicos en las dos vertientes del sadismo: la caliente (a golpes) y la fría (sutil), con ella ganan ellos, los carceleros, reciben por dar palizas, torturar, vejar a personas en los departamentos de aislamientos, un plus económico y otro de impunidad. El sadismo de oficina (o frío) se encubre como la tortura física, sólo que emplean “errores”, “prevaricaciones”, fallos técnicos… todo esto es empleado contra quienes defienden su dignidad y contra quienes no aceptan el chantaje institucional, derechos y accesos a mejoras en la vida carcelaria a precio de sumisión en pro de esta granja industrial que no para su extensión.

Exigimos el fin de los aislamientos, de las sujeciones mecánicas y químicas, la exclusión en esta ganadería de humanos, sigue su fin lucrativo, “clientes fijos”. La dinámica de la sujeción química, sedantes, barbitúricos, psicotrópicos… ha llevado a la Institución Carcelaria a facilitar tratamientos psiquiátricos a diestro y siniestro. No sólo esto supone un delito contra la salud pública, además esto se mueve en el mercado negro de los patios, generando que el consumo de un par de pastillas de unos céntimos de euros de coste, se convierta en la compra de economato de un paquete de tabaco o una tarjeta de teléfono… Aclarando: distribuir muchos psicofármacos supone presxs muy sedadxs y genera consumo adictivo y consumo económico en productos. ¿Cuál es la finalidad rehabilitadora de esta dinámica? Yo no la veo.

Exigimos que se persigan tanto a estos matasanos como a los verdugos torturadores. (Recordar que el médico de Michael Jackson fue condenado por recetar drogas a 4 años).

Por otro lado, la seudociencia de la criminología psicológica y sus perfiles es el mayor despropósito y un insulto a la inteligencia humana. Sus pronósticos no son más coherentes que los del “Pulpo Pol”. Con sus estudios y tablas de valores sólo van encausando a actores de teatro; en su defecto te etiquetan de tantas barbaridades como disponen en su exquisito léxico: antisocial, baja tolerancia a la ¡¿frustración?!, compulsivo agresivo… Entonces dónde vamos a parar, ¿esto es rehabilitación y reinserción o la escuela de Holiwood?. Los hechos hablan por sí solos. No son pronósticos ¿cuántxs reincidentes?, de estos ¿cuáles volvieron más los licenciados en esta escuela o los disidentes? Al igual que se apartó la religión de la justicia. Esta seudociencia es tan perniciosa como la Santa Inquisición.

El encierro, el aislamiento, la incomunicación, el desarraigo… todos los síntomas que produce la cárcel no se curan con drogas, las conductas delictivas no las sana el teatro. Por el contrario, la labor social, el facilitar posibilidades e instruir sí. Claro que pagando a tanto verdugo, a tanto matasano, tantos criminólogos, agentes “policías” sociales, pocos recursos quedan para la política social contra el delito, y bajo esta farsa la industria ganadera humana sigue en auge.

Todo esto debe de existir, dicen los demócratas, el trasfondo no es el porque las conductas delictivas no puedan ser tratadas de un modo coherente, humano y digno. Sino que esto es el icono e la represión democrática en defensa del imperio capitalista. Reprimir es  encarcelar bajo estas circunstancias que vengo exponiendo: torturas, malos tratos, vejaciones… hacerte un borrego, porque los estados se reservan las ejecuciones públicas de castigo ejemplar para “situaciones de excepción”, para proteger el estado de “derecho”. La cárcel/la tortura se ofrece cada vez a más personas y con más facilidad. Quienes avalan este sistema dicen no ser criminales, sus conductas sádicas y sus excesos y abusos de poder son fácilmente encubiertos por el corporativismo. La situación actual conciencia al pueblo a la disidencia, a confrontar al estado (crisis, Plan Bolonia, servicios de salud, viviendas, trabajo…) esta confrontación traerá represión al pueblo, cárcel-tortura. Por esto, porque es un despropósito su función teórica y porque en la práctica es un arma represiva y un sistema de explotación.

¡¡Acabemos con todas las prisiones!!

Ánimos, fuerzas y rebeldía

Baldo

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