La cárcel de Puerto I ha sido desde su inauguración un lugar de tortura, degradación y exterminio, y lo sigue siendo. Hoy, han cortado el agua durante todo el día, supuestamente para limpiar las tuberías. No hay agua corriente en toda la cárcel. No hay un solo grifo del que salga una gota. Hace mucho calor, una temperatura como si estuviéramos en junio, pero los presos de Puerto I hoy no han podido ducharse, y algunos ni siquiera echarse a la garganta un poco de agua. ¿Qué pasa con quienes no tienen dinero para comprarse una botella en el economato? Pues que se han quedado sin beber en todo el día o han tenido que mendigar un trago a sus compañeros más afortunados. ¿Es eso posible?, dirá alguien. No sólo es posible, sino que eso es lo que hay. Para llevarse las manos a la cabeza ¿no? Aunque no desentona con lo que sucede habitualmente en las prisiones del Puerto, lo mismo que en muchas otras: muertes por abandono, situaciones de necesidad extrema, corrupción, extorsión, coacciones, malos tratos…
¡A LA CALLE LA GENTE PRESA!
¡DEMOLICIÓN DE TODAS LAS PRISIONES!
Algo de información en Tokata sobre lo que sucede en las cárceles de El Puerto de Santa María
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